Un hombre que fue asesinado la noche de este miércoles, dentro un parqueo en Curridabat, quedó irreconocible debido a que los dos asesinos no tuvieron piedad y le pegaron la mayoría de los balazos en la cara. Al menos 35 casquillos quedaron en el suelo.
El fallecido fue identificado por las autoridades como Marco Lombana Moreno, de 31 años, colombiano nacionalizado tico, que era dueño del parqueo en el cual fue asesinado. Queda al frente del centro comercial Multiplaza del Este.
Álvaro González, jefe de la Sección de Homicidios del OIJ, dijo que Lombana, quien también era dueño de unas barberías y daba lecciones para manejar moto, fue asesinado por dos gatilleros que se metieron al parqueo para sorprenderlo.
“En cuanto a los hechos, según versiones preliminares de testigos, los sujetos llegan en motocicleta al parqueo, que funciona también como escuela de manejo de motocicletas, ambos se bajan y se acercan a este hombre, desenfundan un arma cada uno y disparan en al menos 35 ocasiones contra la humanidad del hombre”
González dijo que la cantidad de disparos la determinaron por los casquillos que encontraron en el suelo y casi todo los recibió en la cara.
“Podemos mencionar, de forma preliminar, que no se puede determinar la cantidad de heridas en el cuerpo, ya que todos o la mayoría se enfocaron hacia la cabeza del masculino al punto de que tiene deformación en toda la zona la cara, lo que imposibilita hacer un conteo”, añadió.
Falsos clientes
Un aspecto que destacaron en la Policía Judicial fue el hecho de que los dos sicarios se hicieron pasar por clientes, incluso les metieron conversación a varias personas que estaban en las afueras del paqueo.
“Ellos llegan con cascos y los mantienen un rato, pero se los quitan para entablar una breve conversación con las personas que están ahí y preguntar sobre el costo y los horarios de las clases de motocicletas, pero a los pocos minutos llegó Lombana y fue cuando cometieron el ataque”, dijo González.
En cuanto al motivo del violento homicidio, el OIJ descartó que se tratara de un asalto pues los asesinots se fueron directo hacia la víctima y la agarraron a balazos, además sus pertenencias, como un celular y una billetera con casi ¢100 mil, quedaron ahí tirados.
Aunque Lombana no tenía ningún tipo de antecedente, todo apunta a que el asesinato se dio por un ajuste de cuentas.