Una abuelita de 88 años está a un paso de sentirse en paz otra vez.
Doña Isolina Cubero perdió su casa en un incendio, pero muchas personas de buen corazón le han ayudado para armar el cascarón de su vivienda, pero falta un último empujoncito para que pueda habitarla.
Doña Isolina fue rescatada por su nieto Jaime Gutiérrez de las llamas la noche del lunes 6 de julio, cuando su casita ardió por completo en San Isidro de El Guarco, en Cartago. Un cortocircuito en un cuarto fue la causa del incendio.
Para esta humilde familia lo más importante fue salvar a su tesoro: su abuelita, quien se moviliza en silla de rueda pues padece osteoporosis, tiene un problemita en el corazoncito y es anticoagulada.
Sorange Barboza, nieta de doña Isolina, nos contó que su abuelita ha estado muy triste por no tener su casita y por lo que pasó, sin embargo, los vecinos le devolvieron la sonrisa al ayudarles y comprarle el “cajón” de una casa prefabricada.
Esta abuelita es muy querida en el pueblo y en estos tiempos tan rudos la solidaridad no se hizo esperar: la casita ya está armada y quedó preciosa.
“La construcción fue terminada en quince días, una tía nos está dando posada mientras tanto; a la casa aún le faltan los vidrios, un botaguas, cumbreras, el tanque séptico, el marco para las puertas, el cielo raso y la cerámica aunque sea para el cuarto de mi abuelita para que se desplace más fácil”, dijo la nieta.
La familia también necesita una lavadora.
La casita tenía cuatro cuartos, ahora quedó con dos, pero ella y sus amores se van a hacer un puñito para seguir juntos, que es lo más importante para ellos.
Doña Isolina sueña con estar otra vez en su casita, en la que ha vivido tantos momentos felices. Se siente muy agradecida porque no ha pasado frío, ni hambre, mucha gente solidaria les ha echado una mano.
Si usted desea ayudar a esta viejita con algo de los materiales que hacen falta o un dinerito puede llamar al 7261-9749. Entre los afectados hay un niño de 11 años que perdió todas sus cositas.