Dos violentos ataques contra una tía y su sobrina, ocurridos con dos semanas de diferencia, tienen atemorizados a los vecinos de San José de la Montaña en Heredia.
Ambas víctimas describieron que los ataques fueron cometidos por el mismo salvaje, que sería un sujeto alto, moreno, con acné en su cara y quien además tendría un tatuaje en su mano izquierda.
Natalia Muñoz contó con la víctima más reciente fue su mamá, de apellido Pérez, quien fue atacada el pasado viernes cuando se dirigía hacia su casa en la urbanización El Gallito.
El hecho ocurrió a eso de las 4:30 p.m., cuando Pérez regresaba de trabajar y caminaba por una especie de trillo dentro de una propiedad, el cual es muy usado por los vecinos para ahorrarse una caminada de 800 metros hasta la urbanización.
“Se topó a un tipo y ella siguió caminando, pero el sujeto se puso detrás de ella y la agarró del abrigo, luego la pateó en el estómago para tirarla al suelo”, contó la joven.
Muñoz dijo que el desalmado no tenía la intención de asaltar a su mamá, pues nunca intentó quitarle el bolso o el celular, más bien parecía que quería dejarla inconsciente para abusar de ella.
“Él la jalaba como para sacarla del camino y meterla adentro del terreno, mi mamá dijo que él la agarraba de los pantalones como para bajárselos”, añadió.
Gritos de ayuda
La mujer empezó a gritar en busca de ayuda y en medio del forcejeo logró zafarse del desalmado y correr hasta una casa cercana, donde fue recibida por unas personas que la escucharon.
Luego del ataque, Pérez fue llevada por su pareja a la clínica de Barva y de ahí al hospital de Heredia, afortunadamente no sufrió heridas de gravedad, pero sí resultó bastante golpeada.
Otro ataque
Natalia dijo que esta no sería la primera vez que el maleante intenta hacer de las suyas, pues hace unos 20 días también atacó a una jovencita, que casualmente es prima suya.
Según Muñoz, todo ocurrió cuando su prima, quien es menor de edad, salió del colegio de San José de la Montaña para ir a una cita médica.
“Ella iba a agarrar el bus cuando de pronto le salió un tipo de entre unas matas. El sujeto la agarró del cuello y la tiró al suelo, no hizo a quitarle nada, y como ella no se quedaba quieta él le empezó a pegar por la cara”, contó.
A como pudo, la muchacha logró usar su bolso para pegarle en la cara al agresor y luego salió huyendo en busca de ayuda.
“Ella dice que el chavalo andaba la cara tapada, pero que alcanzó a ver que tiene un tatuaje en la mano izquierda y que era alto y moreno. Pensamos que se trata de la misma persona”, añadió.
Muñoz dijo que su mamá espera que le entreguen el informe policial este miércoles para presentar una denuncia ante el OIJ, mientras que en el caso de su prima, la jovencita dijo que no quería interponer una denuncia pues se encuentra muy asustada.
Más patrullaje
La Teja le consultó al Ministerio de Seguridad Pública si conocía estos hechos y si estaban tomando alguna medida para aumentar la seguridad.
En el caso de la colegiala, a través de su departamento de prensa indicaron que ellos lo estaban manejando como un intento de asalto, motivo por el cual reforzaron el patrullaje.
Mientras que en el caso de Pérez, indicaron que como el ataque se dio dentro de una propiedad privada le pidieron a la municipalidad que localice al dueño de ese terreno para que se encargue de chapearlo y delimitarlo con una cerca, de manera que ya nadie pase por ahí, pues los policías no pueden patrullar en ese punto.