Las autoridades esperan que las dos ondas tropicales que se avecinan (la 40 y la 41), no afecten tanto a los vecinos del Pacífico norte, como sucedió con las anteriores.
La Comisión Nacional de Emergencias (CNE) informó, por medio de un comunicado ,que se espera que uno de los fenómenos llegue al país este jueves y el otro el fin de semana.
Según informó el Instituto Meteorológico Nacional (IMN), se pronostica que las ondas afecten principalmente al Pacífico central y sur y también al Valle Central, lo que le daría un respiro a las familias del Pacífico norte que apenas empiezan a recuperarse de las inundaciones de la semana pasada.
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Pese a los informes, la CNE mantiene la alerta roja en los distritos de Cóbano, Lepanto y Paquera del cantón central de Puntarenas y la alerta amarilla para los cantones Guanacastecos de La Cruz, Santa Cruz, Nicoya, Nandayure y en los distritos puntarenenses de Barranca, El Roble y Pitahaya, ya que aún hay suelos saturados y lugares inundados.
Lorena Romero, directora de gestión del riesgo de la CNE, aseguró que solamente quedan 156 personas en albergues. En Paquera y Jicaral y otros sectores hay hogares muy dañados por lo que el retorno de las familias a sus casas no será posible por el momento.
Se mantienen las alertas amarilla y roja para la península de Nicoya.
“Estamos pendientes por la llegada de las nuevas ondas tropicales ante la necesidad de hacer cambios en las alertas”, dijo Romero.
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Precisamente, el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) ingresó a la zona peninsular para el levantamiento de los datos de las familias afectadas y proceder con las ayudas temporales. Este miércoles el Ministerio de Vivienda se encargó de hacer una valoración de las infraestructuras dañadas y determinar las acciones a seguir.
Por su parte, el MOPT empezó también la evaluación de los daños, mientras que el ICE trabaja en la rehabilitación de los servicios eléctricos y de telecomunicaciones. El AYA mantiene el apoyo a las ASADAS para determinar las afectaciones y distribuye agua potable en los lugares afectados por medio de camiones cisternas.