Un supuesto grupo criminal se habría dedicado a robar carros para luego alterarlos con la información de vehículos con pérdida total que habían comprado a precios regalados, para así vender los chuzos robados por más de ¢8 millones.
Según el Organismo de investigación Judicial (OIJ), este grupo está vinculado con al menos 17 robos de carros cometidos en distintos puntos de San José, por medio del método del descuido.
A raíz de estos hechos es que este martes la Policía Judicial realizó un operativo con el cual lograron detener a nueve sospechosos, entre estos al supuesto líder de la banda, un hombre apellidado González Arroyo, de 56 años.
Los otros detenidos son siete hombres de apellidos Caamaño Montarán, de 75 años; Caamaño Rodríguez, de 50; Méndez Porras, de 40; González Calvo, de 23; Solís Jiménez, de 51; Caamaño Rodríguez, de 40; y Arias Solano, de 31, así como una mujer apellidada Calvo Méndez, de 55 años.
Estos fueron capturados por medio de 19 allanamientos realizados en Heredia, San José, San Juan de Dios en Desamparados, Palmares, Río Segundo en Alajuela, Upala y Sarapiquí. Los sitios allanados fueron viviendas, ventas de repuestos y bodegas donde en apariencia almacenaban los carros que estaban con pérdida total, así como los repuestos y en ocasiones los carros robados, los cuales mantenían por un tiempo en esos lugares después de cometido el robo.
“Hasta el momento se ha decomisado, carrocería con alteración de señas y marcas, varios juegos de placas metálicas con denuncia por robo, etiquetas falsas con información de vehículos, joyas, un aproximado a los 18 mil dólares y 4 millones de colones en efectivo, así como los vehículos de uso personal de los sospechosos, ya que aparentemente estos fueron adquiridos con dinero proveniente del desarrollo de la mencionada actividad ilícita”, informó el OIJ.
De acuerdo con el informe preliminar, al parecer el supuesto líder se dedicaba a comprar vehículos que habían sido declarados como pérdida total, ya fuera por un accidente u otras causas, y posteriormente le encargaba al grupo el robo de vehículos con características similares al que había comprado con pérdida total.
“Una vez que tenían en su poder el carro robado, al parecer otra persona se encargaba de realizar la alteración de señas y marcas al carro robado, para colocarle la información del auto que estaba declarado como pérdida total, mientras que otra persona aparentemente se encargaba de elaborar los stickers que contienen la información del vehículo y los cuales traen de fábrica”.
Presuntamente, una vez que el carro robado estaba listo con la información del vehículo que fue declarado como pérdida total, dicho auto era colocado en una venta de automóviles (en apariencia el dueño de la venta de autos desconocía el oscuro negocio) para que fuera comercializado.
“Al parecer, el presunto líder compraba los carros con pérdida total entre 500 mil y un millón de colones, mientras que los autos que eran robados y colocados a la venta mediante la modalidad antes citada eran vendidos entre los 8 y 12 millones de colones”, señaló el OIJ.
Por otra parte, al parecer el carro declarado con pérdida total era desarmado y las partes eran vendidas en ventas de repuestos de vehículos que al parecer pertenecen al líder de la organización.
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Finalmente, los detenidos quedarán a las órdenes del Ministerio Público, para que se les determine su situación jurídica.