Dos funcionarios del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) de apellidos Araya Cornejo y Castillo Campos, fueron condenados por pedir sobornos a cambio de ayudar a personas a pasar pruebas de manejo en el Cosevi de Puntarenas.

El Tribunal Penal de Hacienda y la Función Pública los condenó a ambos a cuatro años de prisión por el delito de concusión (funcionario público que pide un soborno).

Sin embargo, ninguno de los dos pondrá un pie en prisión, pues por tratarse de una condena muy baja, el Tribunal les dio el beneficio condicional de cumplir la condena en la choza, pero con tobillera electrónica.

Además, los dos quedaron inhabilitados de ejercer cualquier cargo público durante cuatro años.

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La Fiscalía Adjunta de Probidad, Transparencia y Anticorrupción (FAPTA) indicó que el juicio por este caso se realizó entre agosto y setiembre de este año, pero fue hasta este jueves que se dio a conocer la resolución de los jueces.

“En el juicio, la Fiscalía acreditó que los imputados cobraron a cuatro personas sumas que oscilaban entre los ¢10.000 y los ¢100.000, antes o después de que la persona realizara la prueba práctica de manejo”, informó la Fiscalía.

Tres más

En agosto de este año otros tres evaluadores de pruebas prácticas de manejo, pero de Pérez Zeledón, apellidados Calderón, Arrieta y Vargas, fueron condenados por este mismo delito.

Vargas recibió una condena de seis años, mientras que Calderón y Arrieta fueron sentenciados a dos años de cárcel cada uno. A los tres, al igual que a Araya y a Castill, se les dio el beneficio de casa por cárcel con monitoreo electrónico.