Tres hombres tendrán que pagar el equivalente a ₡150.000 en útiles escolares luego de reconocer que fueron a la playa pese a la orden sanitaria dictada por el Ministerio de Salud que prohíbe visitar esos lugares como medida de prevención contra el COVID-19.
Además, otro sujeto fue condenado a cuatro meses de prisión por el mismo motivo; sin embargo, él recibió un beneficio carcelario por lo que no tendrá que estar preso.
La Fiscalía informó este lunes que dos de los hombres, de apellidos Castillo Rojas y Rowe Orozco, visitaron la playa, en Matina de Limón, cuando ya se había dictado la orden sanitaria. Ambos fueron notificados el 09 y 18 de abril por los Guardacostas, quienes les dijeron que no debían estar ahí.
Aún así el 28 de abril, a eso de las 11:00 p. m., los hombres se encontraban en ese sitio otra vez, por lo que fueron detenidos por los oficiales.
Los otros dos sujetos, de apellidos Winter Rowe y Guadamuz Solera, protagonizaron un caso muy similar. Ellos fueron sorprendidos en la misma playa por los policías el 13 y 16 de abril, en las dos ocasiones los uniformados los notificaron para hacerles saber que no debían estar ahí. Pese a eso el 28 de abril volvieron a llegar, por lo que fueron arrestados y llevados a la Fiscalía.
A los cuatro sujetos se les abrió un proceso penal por el delito de desobediencia a la autoridad y todos aceptaron los cargos para evitar ir a juicio. Quienes deberán comprar los útiles escolares son los hombres apellidados Castillo, Rowe y Guadamuz, mientras que Winter descuenta el beneficio de ejecución condicional de la pena.