Sucesos

(Video) Comerciante hasta dejó de ir a misa luego de que lo metieran a la cárcel por un supuesto error

Este vecino de Alajuela busca limpiar su nombre y que le devuelvan la plata y el arma que le decomisaron

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Asdrúbal Vargas Venegas es un comerciante de 61 años que vive una pesadilla de la que todavía no despierta, ya que lo involucraron en un asalto que él asegura que no cometió.

Cuenta que una abogada de la Defensa Pública le “recomendó” que se declarara culpable para que la pena fuera menor, pero él insistió en su inocencia. Entonces, mientras la investigación siguió, estuvo privado de libertad en la cárcel de Pococí por un mes.

Luego lo liberaron, pero debía firmar cada 15 días en los Tribunales de San José.

Finalmente, los representantes del Ministerio Público de San José le pidieron a los jueces un sobreseimiento definitivo porque no encontraron pruebas suficientes que lo ligaran al robo, pero asegura que el daño ya se lo hicieron y lo peor es que todavía no termina, pues no le han devuelto lo que le decomisaron: un arma de fuego y ₡406 mil que llevaba en la bolsa.

Además, él considera que lo mínimo que merece es una disculpa, ya que esta situación le ha causado un gran daño psicológico y emocional, que solo pasaba encerrado en la casa y seis meses antes de que iniciara la pandemia dejó de ir a la iglesia por la vergüenza de que los vecinos lo vieran como ladrón.

“Me han tratado como una basura, antes iba a misa en Sabanilla de Alajuela, que es un lugar de campo, y me da vergüenza que me señalen como ‘el asalta pollos’, porque no hay nadie que limpie mi nombre. La gente duda y tiene todo el derecho”, comentó Vargas.

En este mismo robo también involucraron a un exempleado de Vargas, Joshua Arias Lanzas, de 19 años, pero a él lo mataron en abril anterior.

En una venta de pollo

Este caso comenzó el jueves 11 de julio del 2019, a las 7:45 de la noche, cuando asaltaron una venta de pollo en Plaza Víquez, San José. En una cámara de seguridad se ve cuando dos muchachos en pantaloneta entran al local y amenazan a dos vendedores.

Asdrúbal, quien tiene un negocio en el Centro Comercial del Sur y además es prestamista, cuenta que esa noche él manejaba un carro e iba con Joshua, ellos pasaron a unas cuadras de la venta de pollo y vieron unas patrullas, pero no les prestaron mayor atención ya que iban a un supermercado a comprar unos huevos. No obstante, un oficial les pidió que se detuvieran y desde ese momento comenzó el calvario.

“El policía me preguntó que si andaba algo que me comprometiera, le dije que no, que solo un arma de fuego calibre 40, pero que contaba con los documentos de inscripción. Me dijo que la entregara, por lo que la descargué y se la di, pero en ese momento nos dijo que quedábamos detenidos porque habíamos cometido un asalto.

(Video) Comerciante vive calvario luego de que lo metieran a la cárcel por equivocación

“Le dije que me estaba dando una broma, porque minutos antes pasé cerca de donde ocurrió el asalto y vi dos patrullas. Nos dijo que éramos unas ratas, por el radio escuchaba que decían que se robaron cincuenta mil colones, que los maleantes andaban de negro, pero nosotros no vestíamos de negro”, mencionó don Asdrúbal.

Los llevaron a la delegación de la Fuerza Pública de Sagrada Familia, luego al juzgado y finalmente los encerraron. El testimonio de los vendedores del local involucraba a Asdrúbal y a Joshua.

Sin embargo, el 31 de enero de este año los vendedores volvieron a declarar y en apariencia se contradijeron sobre el primer testimonio, expresaron que no sabían qué habían firmado en la denuncia y además señalaron que lo robado era ₡40 mil y no los ₡406 mil que le decomisaron a Asdrúbal. Además, dicen que les quitaron un celular y una tableta.

Investigan a vendedores por falso testimonio

Por estos testimonios contradictorios y tras ver que Asdrúbal y Joshua no andaban la misma ropa que usaban los asaltantes que quedaron grabados en el video de seguridad, la Fiscalía pidió el sobreseimiento definitivo el 21 de febrero anterior.

Además, el Ministerio Público dijo que se encontraban ante un delito de falso testimonio por parte de los vendedores y por eso ordenó una investigación contra los empleados de apellidos Martínez Rosales y Rivas Solano.

El juzgado dijo que a Asdrúbal Vargas y a Joshua Arias les daban el sobreseimiento por duda, pero Vargas apeló esta resolución el 1º de junio anterior y pide que le den el sobreseimiento por certeza.

“Mi nombre lo mancharon y no es justo que digan que soy inocente por dudas, cuando hay pruebas de que no estuve involucrado en el asalto y que incluso los vendedores alteraron sus testimonios para culpar a unos inocentes, la verdad siempre prevalece y eso es lo que quiero”, señaló.

Asegura que el dinero que le decomisaron se perdió de las oficinas de la Fiscalía y por eso la fiscala Ingrid Guth denunció en el OIJ este supuesto delito de hurto, ya que al parecer la plata la recibió el encargado de bodega de evidencias, de apellido Picado, pero ahora dice que no la encuentra.

Alejandra Morales

Alejandra Morales

Bachillerato en Periodismo en la Universidad Internacional de las Américas y licenciada en Comunicación de Mercadeo en la UAM. Con experiencia en temas de sucesos y judiciales.

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