EscucharUn comerciante oriental, de apellido Tingpefing, se cansó de ser víctima del hampa y baleó a dos asaltantes, causándole la muerte a uno de ellos.
El hecho se dio este martes, a las 9 de la noche, en el súper Buena Suerte, en El Tejar de El Guarco, Cartago, 200 metros al este del templo católico.
El OIJ informó que el muchacho que murió tenía 17 años, mientras que otro joven que resultó herido tiene entre 16 y 17.
Según se supo, cuando los presuntos maleantes llegaron a cometer el asalto, en el local estaban una oriental, esposa del propietario, una hija de ellos y dos clientes. Tingpefing estaba en un carro afuera del súper y vio a los sujetos entrar con pasamontañas, por lo que fue corriendo a ayudar a su familia.
Al entrar vio a uno de los menores encañonando a su compañera sentimental y al otro dentro del mostrador buscando la plata.
El oriental había comprado tiempo atrás una pistola para defenderse de los maleantes, por lo que no dudó en usarla.
El jovencito que murió recibió balazos en la cabeza y en el cuello y el otro sospechoso fue impactado dos veces en el estómago. Los dos fueron llevados al hospital Max Peralta, pero uno murió poco después de ingresar.
Enrique Arguedas, director regional de la Fuerza Pública de Cartago, dijo que el oriental tenía el arma en regla y permiso de portación.
Esta no era la primera vez que trataban de robarle al extranjero, incluso algunos vecinos dijeron hace un tiempo que unos hombres llegaron a cometer un asalto y el oriental los persiguió hasta la calle volando plomazos.
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“Por el tema del idioma es un poco complicado comunicarse con los orientales, por lo que viene una persona acreditada por la embajada china como traductora para mediar con las autoridades judiciales y tener mayor claridad de lo que sucedió.
“El dependiente disparó contra los muchachos y en el lugar quedó un arma tirada que sería la usada por los sospechosos, la cual podría ser de juguete”, relató el jefe policial.
Varios testigos.
“Vivo cerca y cuando escuché los balazos me vine inmediatamente, se escucharon como 15 detonaciones. Dos muchachos menores de edad intentaron asaltar al chino y parece que este, en defensa propia, le arrebata el revólver a uno de ellos y los impactó”, contó un lugareño que prefirió no decir el nombre.
“Esta es la cuarta vez que asaltan este lugar y el chino siempre se ha defendido. Esta vez había dos clientes cuando se dio el suceso, incluso una señora quedó boca abajo en el tiroteo, pero gracias a Dios no sufrió ninguna herida. La esposa del chino es la que por lo general está en la caja”, agregó el vecino.
Según se supo, los presuntos asaltantes eran vecinos de El Guarco y uno de ellos estudiaba en un colegio cercano.
