El constructor Harold Vargas Vega perdió la paz el sábado 1° de febrero, cuando su perro Cucuy se perdió.
Él contó que ese día en la mañana la mamá lo sacó al patio para que hiciera sus necesidades fisiológicas y luego no supieron más de él. El hecho se dio en San Vicente de Moravia, San José.
“El portón de la casa estaba cerrado, pero no con llave, existe la posibilidad de que alguien abriera y se lo llevara. Yo lo busqué por toda la propiedad y no apareció por ningún lado, hasta me metí a un río que está detrás de la casa.
“Cucuy llegó a la casa hace 14 años. Recogimos una perrita que venía preñada y poco después él nació. Es como un hijo para mí, duerme debajo de mi cama y, como ya está viejito y le faltan dientes, yo le compro un alimento especial, menudos de pollo y también hígado, ¡le encantan!", contó.
Vargas dice que el peludito está acostumbrado a que lo chineen mucho y teme que esté triste o pasando necesidades.
“Me hace muchísima falta, hasta he llorado porque él es mi compañero. Yo no tengo redes sociales, pero una prima y varios amigos han estado ayudándome a compartir la foto de Cucuy para que si alguien lo ve me pueda llamar.
“También mandé a imprimir unos volantes y he salido varios días a la calle a pegarlos en los postes y también a entregárselos a la gente para que me ayude a divulgarlos. Algunas personas son amables y los aceptan, otras no entienden lo que ese perro significa para mí y ni me dan pelota”, relató.
Si usted ha visto a Cucuy o sabe dónde está, llame lo antes posible a Harold al teléfono 6264-6620. Él dará una recompensa a la persona que lo ayude a reunirse con su perrito.