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El dueño de las tiendas SyR y tres personas más fueron puestos en libertad después de que los denunciaran por la privación de libertad de otro oriental.
El empresario de apellido Lin tendrá que estar en arresto domiciliario y usar tobillera electrónica porque además enfrenta la causa por ser sospechoso de pegarle una humillante golpiza a sus trabajadoras.
Mientras que su hermano y otros dos hombres deben firmar cada 15 días, no acercarse ni perturbar a víctimas ni testigos, no recibir visitas en el domicilio ni pueden salir del país.
Dicha audiencia se realizó en los tribunales de Pavas y aunque el Ministerio Público pidió prisión preventiva, la jueza rechazó la solicitud.
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El operativo se realizó el jueves 11 de mayo en las torres de apartamentos en La Sabana, donde vive Lin.
El oriental estuvo seis meses en prisión preventiva por la humillante paliza contra dos empleadas de una de sus tiendas que provocó gran indignación, pues el video circuló en redes sociales. De momento se desconoce si tiene medidas cautelares.
La agresión aparentemente ocurrió el 14 de agosto del año pasado, pero se dio a conocer tres meses después, y se ve a las dos trabajadoras hincadas y otras dos mujeres que les pegaron con palos por el aparente robo de dinero de la caja registradora, pero al final la plata no faltaba.
A una de las víctimas le cortaron el pelo y varias personas observaban lo que ocurrió como manera “aleccionadora” para el personal.
Por la agresión también fue detenida una mujer de apellido Alvarado como sospechosa de privación de libertad agravada y un hombre de apellido Hu.
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