Al panameño Roberto Moreno Grajales, sospechoso de asesinar a una profesora en su país, se le acabaron las “vacaciones” en Costa Rica y este viernes fue echado de Tiquicia por la Interpol.
Moreno, de 39 años, fue sacado del país como parte de un proceso de extradición solicitado por las autoridades panameñas, que pidieron que fuera enviado a tierras canaleras para que le haga frente a la justicia por la muerte de su pareja sentimental, la profesora Diosilia Martínez Villarreal.
“Este viernes en coordinación con las autoridades panameñas se realizó la entrega formal en el aeropuerto Juan Santamaría de Moreno, quien afronta un proceso abierto en Panamá que podría ser encarcelado por 30 años”, dijo Luis Diego Morera, subjefe de la oficina de Interpol-San José.
Moreno, quien era profe de matemática en Salitral de Renacimiento, en Chiriquí, fue detenido el 6 de marzo de este año en La Palma de Puerto Jiménez, donde trabaja como peón agrícola. Además recibía ayuda económica de familiares suyos en Costa Rica.
“Él usaba la identidad de un primo de nacionalidad panameña, esto lo logramos determinar por medio de documentación encontrada en la casa donde estaba viviendo”, dijo Morera.
Dos años huyendo
El crimen por el que Moreno era buscado se remonta al 11 de noviembre del 2016, cuando Diosilia Martínez desapareció junto a su hija de 2 años. La menor fue encontrada al día siguiente caminando sola.
El cuerpo de la educadora fue encontrado el 5 de diciembre de ese año dentro de una fosa clandestina en la comunidad de Salitral, distrito de Renacimiento, en un terreno que era propiedad de la mamá de Moreno.
Este no es el único extranjero echado del país esta semana. El jueves las autoridades extraditaron al español Paulino Delgado Ordaz, quien tiene una condena pendiente de 6 años en Estados Unidos por tráfico internacional de drogas.