El cuerpo del profesor Ignacio López Rosales, de 50 años, fue encontrado este viernes en horas de la tarde por sus vecinos dentro del apartamento en que vivía, en Matapalo de Santa Cruz, Guanacaste.
Nacho, como le decían de cariño, era profesor en ese cantón y tenía muchos años de ejercer.
Además fue profesor de los hermanitos asesinados durante la masacre de Matapalo el 14 de febrero del 2016. Ellos tenían 6, 8 y 12 años, junto a ellos también fueron asesinados sus padres Yeimmy Jéssica Durán Guerra, de 38 años, y Dirk Beauchamp, de 57 años. Por ese crimen un hombre llamado Adrián Salmerón descuenta 183 años de cárcel en Nicaragua.
Según trascendió, López era maestro en la escuela de Matapalo y este viernes no se presentó a trabajar, por lo que sus compañeros y allegados le hicieron varias llamadas y como no lograron localizarlo se empezaron a preocupar.
Una sobrina y una cuñada fueron quienes encontraron el cuerpo dentro de su apartamento en Lomas de Matapalo, a eso de las 4 de la tarde, y de inmediato llamaron a la Policía.
El cadáver estaba en una de las habitaciones y según trascendió tenía heridas de puñal, sin embargo, el OIJ informó, por medio de la oficina de prensa, que será hasta este sábado que den mayores detalles sobre el caso y las causas de muerte.
De manera extraoficial, se dijo que el “profe” había compartido la noche del jueves con varios amigos en una fiesta, y además que su carro estaba abandonado y chocado en 27 de Abril a 30 kilómetros de Matapalo.
Ignacio había conversado con La Teja cuando ocurrió el asesinato de los hermanitos y aseguró que eran niños muy queridos y que se portaban bien, pero era evidente que tenían problemas en su casa.