Ha pasado un año y un mes desde que fueron encontrados los restos de Emilce Soto Jiménez, de 48 años, y su familia sigue viviendo una pesadilla.
La mujer fue víctima de un brutal homicidio en Palmar Sur, y sus allegados viven atormentados por el temor de que no se haga justicia.
El principal sospechoso del crimen es un hombre identificado como Valverde Chinchilla, de 47 años, quien permanece en libertad bajo arresto domiciliario con brazalete electrónico, lo que genera indignación y miedo entre los allegados de Emilce.
“Estamos con mucha disconformidad, él sigue libre en Volcán de Buenos Aires, aunque tiene muchísima evidencia en su contra, incluso, en su celular. Pedimos con urgencia a las autoridades que le cambien las medidas, porque tememos que se dé a la fuga”, expresó Xenia Castro, hermana de la víctima.
Doña Xenia le prometió a su hermana que buscaría justicia por su crimen y la próxima semana se vencen las medidas contra el sospechoso, por lo que ella desea que se acabe la libertad del imputado. Sin embargo, confiesa que la espera ha sido larga y frustrante.
Aunque recientemente se les informó que la acusación contra Valverde ya está lista, aún no hay fecha para audiencia preliminar, mucho menos para ir a juicio.
“Otros casos ya han recibido justicia. ¿Por qué en este no se actúa con la misma urgencia? ¿Qué más necesitan para cambiarle las medidas?”, cuestionó Xenia.
La hermana contó que el mismo imputado fue llevado, por segunda vez, en julio a juicio por el caso de Estrella Dayana González Araya, una jovencita, de 16 años, cuyo cuerpo fue encontrado el 23 de octubre del 2020. A ella le arrebataron la vida y su cuerpo fue dejado dentro de un pozo en playa Garza, Osa; sin embargo, Valverde fue absuelto de los cargos.
“Mi familia y yo fuimos al juicio de Estrellita para apoyarlos, y puede creer que reportaron que ese hombre estaba con el brazalete apagado, y cuando la jueza le preguntó, él le dijo: ‘Seguro no sirve esa cochinada’. Entonces, la jueza le respondió: ‘Usted no puede andar con eso descargado ni apagado’, pero de ahí no pasó a más. En cualquier momento se puede fugar”, dijo Xenia.
Xenia asegura que tuvo que mantenerse muy fuerte para tener frente a ella al sospechoso de acabar con la vida de su amada hermana, quien no ha dejado de recibir beneficios, porque para ese juicio le dieron hospedaje y hasta alimentación.
Añade que en su desesperación, les ha cuestionado a quienes llevan el caso de su hermana, qué van a hacer y quién le va a dar la cara si el hombre se da a la fuga.
La Teja consultó a la Fiscalía sobre el caso de Emilce, y también si han valorado solicitar un cambio en las medidas.
“La Fiscalía de Osa informó que el caso cuenta con un requerimiento conclusivo, el cual será revisado por la Fiscalía Adjunta de Género. Posteriormente, será comunicado a las partes, para lo que corresponda.El despacho solicitó la prórroga de medidas cautelares”, indicó la Fiscalía
Emilce era una madre de cinco hijos, que dejó un enorme vacío.
Su hijo menor, Jordan Anchía, fue el último en hablar con ella, el 8 de marzo de 2024. Al no obtener respuesta los días siguientes, fue él quien dio la voz de alerta ante las autoridades.
Dolorosa lucha
“La única esperanza que tenemos es que se haga justicia, ya comprendimos que ella no está. La recuerdo con mucho cariño y por momentos mis lágrimas caen, pero Dios, que ha sido tan bueno, me da fuerzas a mí y también a mi familia, en especial a mi madre, como a los hijos de ella, Jordan, Joselin, Frannia, Karla y Randall. Ha sido muy triste, pero confiamos, primeramente, en Dios y luego en las leyes, para que este caso no quede impune”, dijo la hermana.
“La recuerdo y por momentos la miro en sueños sonriéndome. Sé que donde quiera que esté, ella sabe que estamos luchando, pues le prometí que íbamos a luchar hasta el final, aunque sé que ella no me escucha, pero Dios sabe que haré todo para que se haga justicia. Después de eso habrá un descanso para nuestra familia”, agregó Xenia.
El imputado Valverde Chinchilla fue padrastro de Estrella, y fue la última persona con quien vieron a la muchacha. Además, es totalmente reconocido por las autoridades, porque en el 2004 violó e intentó matar a una hermana de Estrella al enterrarla viva en una siembra de árboles de tecal, en Ciudad Cortés, Osa.