Los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) revelaron nuevos detalles sobre el homicidio de Eduardo Prado, de 76 años, quien fue hallado sin vida dentro de su vivienda incendiada el pasado 29 de octubre en Guadalupe de Goicoechea.
Según las investigaciones, la sospechosa principal es la sobrina del fallecido, de apellido Alvarado, quien vivía con él junto a su pareja sentimental, un hombre colombiano de apellido Múnera, en la misma propiedad. Además, la hermana del fallecido, de apellido Prado, de 62 años, y madre de Alvarado.
Según indicó Pablo Calvo, jefe a. i. del Departamento de Investigaciones Criminales del OIJ de San José, la pareja fue vista saliendo de la vivienda minutos antes de que se iniciara el incendio. Ellos vivían con el fallecido en esa propiedad.
“Dos días después del incendio compraron un carro de contado en una venta de autos en Escazú”, explicó Calvo.
El jefe policial agregó que la pareja empeñó varios artículos pertenecientes al adulto mayor en casas de empeño de San José para obtener más dinero.
Cuando los agentes detuvieron al ciudadano colombiano en el sector de La California, este conducía el vehículo propiedad de la víctima, del cual, según la investigación, se habrían apoderado tras el incendio.
Las autoridades creen que el móvil del crimen fue el robo, ya que los detenidos aparentemente se apoderaron de una considerable suma de dinero que el fallecido guardaba en su casa.
“La víctima tenía un gusto por usar joyas y era prestamista desde hace muchos años. Le quitaron una cantidad importante de dinero que almacenaba en su vivienda”, detalló Calvo.
Durante los allanamientos realizados por el OIJ en Zapote y La California, los agentes decomisaron evidencia clave: dos vehículos, documentos importantes para la investigación, dinero en efectivo en dólares y colones, un arma no letal, teléfonos celulares, joyas y relojes pertenecientes al fallecido.
Los tres detenidos quedaron a la orden del Ministerio Público, que determinará las medidas cautelares que enfrentarán mientras avanza la causa.

