Ana Belén Barvar, integrante del colectivo Brujas Feministas CR, aplaudió en nombre de su grupo que en la Asamblea Legislativa avance el proyecto de ley que castigaría con cárcel a las personas que se quitan el condón sin el consentimiento de la otra persona con la que mantiene una relación sexual.
A esta acción se le conoce como stealthing (en sigilio), la diputada Paola Vega presentó el proyecto desde el 15 de julio del 2019 y este martes 12 de octubre del 2021 avanzó con siete votos a favor y dos en contra.
Votaron a favor los diputados Franggi Nicolás, Jorge Fonseca y Wagner Jiménez, de Liberación Nacional (PLN); la independiente Paola Vega; Carolina Hidalgo, de Acción Ciudadana (PAC); Pedro Muñoz, de la Unidad Social Cristiana (PUSC) y José María Villalta, del Frente Amplio (FA). Mientras que en contra los diputados Wálter Muñoz de Integración Nacional (PIN) y Mileyde Alvarado, de Restauración Nacional (PRN).
“El stealthing es un delito que debe ser penado como violación adyacente cuando en una relación sexual se acuerde previamente el uso del condón como método de protección de barrera, quitarse el condón sin el consentimiento de la otra parte equivale a violentar su autonomía.
“En muchos casos estos actos se deriva en embarazos no deseados para lo cual ni siquiera contamos con una ley de aborto en la que exista la causal de violación que respalde los derechos humanos de las mujeres en este país, acentuando la pobreza, al igual que la transmisión de una amplia gama de infecciones sexuales, VIH y VPH que podrían resultar inclusive en lesiones cancerígenas fatales”, dijo Barvar.
La pena sería de 6 a 10 años, pero aumentaría de 8 a 12 años si ocurre un embarazo o el contagio de una enfermedad, así como el hecho de que se involucre a una persona menor de edad o se provoque un daño psicológico grave.