Dos jóvenes de apellidos Betancourt Chacón, de 20 años, y Sandí Varela, de 19 años, fueron detenidos por el OIJ como sospechosos de robar información de tarjetas bancarias para hacer compras por Internet.
En apariencia, los muchachos gastaban el dinero de las víctimas en computadoras y celulares para luego venderlos. El perjuicio económico de la estafa es de aproximadamente ¢1.600.000.
La Policía Judicial informó que los sospechosos fueron detenidos el lunes 13 de julio, Betancourt, quien sería el autor intelectual de las fechorías, fue capturado en su casa, en San Rafael de La Unión, mientras que a Sandí lo pescaron en Pavas cuando estaba por ingresar a su trabajo en un centro de llamadas.
Dentro de la vivienda de Betancourt, los investigadores decomisaron evidencias como un teléfono celular y 40 chips telefónicos, que en apariencia fueron usados para el robo de la información.
Siguiendo la pista
Según la sección de Fraudes del OIJ, los vivazos son vinculados con cuatro de estafas que fueron cometidas en los últimos cinco meses.
“Los sospechosos utilizaban diferentes técnicas y así lograban sustraer información personal de las tarjetas de crédito de las víctimas, con las cuales realizaban compras de forma virtual, en diferentes comercios, en las cuales compraron entre otras cosas computadoras, teléfonos celulares y diferentes dispositivos electrónicos”, detalló la oficina de prensa del OIJ.
Aparentemente, Betancourt era quien se encargaba de robar la información y hacer las compras en Internet, mientras que su amigo se encarga de retirar los paquetes una vez que llegaban al país.
“Ellos utilizaban diferentes sistemas de mensajería y recogían las encomiendas en vía pública para no dejar evidencia de ninguna residencia”, informó la Policía Judicial.