Los jóvenes menores de edad que se hayan portado mal ahora pueden reivindicarse y evitar ir a la cárcel, eso sí, la tarea no es nada fácil, ya que deben realizar un estricto servicio comunal.
Por ejemplo, en las calles del centro de Turrialba los postes están bien pintaditos como parte de la iniciativa de la Fiscalía Adjunta Penal Juvenil en coordinación con el Ministerio de Educación Pública (MEP) y el grupo Turrialba Cívica.
La Fiscalía indicó que esta oportunidad se da después de abrirse una causa penal por delitos de menor gravedad y baja violencia como hurtos, daños, portaciones de arma, conducciones temerarias, en las que el menor se compromete a reparar la “torta” en su comunidad.
“El programa busca reintegrar a los jóvenes de una manera sana a su comunidad, mediante acciones positivas que sean percibidas por las personas de Turrialba como un esfuerzo por el embellecimiento de la ciudad y la mejora de su infraestructura” explicó Omar Jiménez Madrigal, fiscal adjunto penal juvenil.
En el caso de Turri, más de 100 postes fueron transformados por 10 menores. Tuvieron que limpiarlos, repararlos. Por último les tocó escoger un diseño y pintarlo.
Como un homenaje especial los diseños de los postes tiene relación con el poeta Jorge Debravo, quien nació en Turrialba, Las pinturas tienen parte de sus poesías. Incluso se realizó una actividad en la que participó Magarita Salazar, viuda de don Jorge.
La voluntad de realizar el trabajo comunal permite cerrar el proceso penal.
El fiscal aseguró que quieren promover está iniciativa en otras comunidades.