Sucesos

¿Cómo supo Interpol en Nueva Zelanda que niña tica era violada?

Principal sospechoso fue condenado a 497 años de cárcel por 38 delitos y su hermano a 19 años

EscucharEscuchar

El Tribunal de Desamparados dejó caer todo el peso de la ley sobre Jason Rojas Retana, a quien le metió 497 años de cárcel por violar a una niña muchas veces.

Esa condena es por 38 delitos.

Para condenarlo fueron claves las labores de inteligencia que hizo la Interpol y así lo reconocieron los jueces.

El trabajo de la policía internacional permitió frenar las violaciones que sufría la pequeña. La Interpol detectó que en Internet había videos de las atrocidades que sufría a manos de Rojas.

Rafael Rojas Retana,hermano de Jason, también fue condenado, pero solo a 19 años. La madre de la niña había sido llevada a juicio, pero fue absuelta debido a que hubo dudas.

La pena de Jason Rojas queda en 50 años, la máxima permitida por la ley nacional.

Las violaciones de la niña ocurrieron entre el 2012 y el 2017 en Higuito de Desamparados, en la casa donde vivían la niña, su hermano, sus padres y Jason.

En el juicio se supo que la Interpol lanzó una alerta internacional al descubrir los vídeos que estaban en páginas de pedófilos y abusadores y que eran vistos en Nueva Zelanda, Francia y Australia.

En esos videos salía la niña tica, que tenía seis añitos cuando los delitos empezaron a darse. En una de las imágenes se veía el nombre del centro educativo al que iba la chiquita.

Los oficiales de la Interpol en Costa Rica recibieron el dato de que se podía tratar de una niña tica y empezaron su investigación, que permitió llevar a la dirección donde estaba el sospechoso de mandar la pornografía.

A ese sitio se llegó por medio de la dirección IP de la computadora (algo único de cada aparato) y fue posible también identificar a la chiquita.

“La Interpol salvó el caso, a través del monitoreo de depredadores sexuales que hace determinaron que había una niña que era violada y abusada y que estaba en Costa Rica. Hay que reconocer el gran trabajo que hicieron la Interpol y el OIJ, el agente Óscar Zamora, quien vino como testigo al juicio y fue quien se puso a trabajar en el caso para determinar quién era la persona responsable”, dijo la jueza Wendy Montero.

A Jason el OIJ le decomiso más de 300 videos en los que se grabó con la niña. Esa prueba terminó de hundirlo.

Rojas fue condenado por 21 delitos de violación simple, uno de violación calificada, ocho de pornografía infantil, dos de abuso sexual, un delito de tenencia de pornografía, dos delitos de agresión con arma, dos delitos de producción de pornografía y un delito de privación de libertad agravada.

“Buena pinta”

Los jueces reprocharon a Jason sus acciones y dejaron ver que la investigación del caso fue compleja porque para todos, Rojas era una buena persona y la familia tenía 15 años de conocerlo. Por eso vivía en la misma casa de la niña.

“Jason conocía la dinámica de la familia, era un miembro de la familia, se había ganado la confianza de los papás, cuidaba a los niños y los llevaba a la escuela, cenaba con ellos, colaboraba, para las demás personas era agradable educado, e incapaz de hacer nada”, dijo la jueza Montero.

Los jueces también le reprocharon a Jason conseguir que su hermano cometiera delitos contra los niños.

“Fue usted quien lo arrastró”, le dijo el tribunal.

Rafael, el hermano, vivía a 500 metros de la casa de la familia.

La madre de la niña –una mujer de apellido Valverde– fue acusada por la Fiscalía por los delitos de violación en modalidad de cómplice, incumplimiento a la patria potestad y corrupción de menores.

Pero fue absuelta por dudas, ya que no se pudo demostrar que supiera lo que ocurría y los testigos aseguraron durante el juicio que los padres de la niña se mostraban siempre preocupados por sus hijos.

“No era cierto que la mamá tenía una relación con el sospechoso, como se dijo en la acusación. Los padres de la menor eran una pareja funcional que por casi diez años habían tenido que luchar con un hijo con muchos problemas de salud y más bien todo esto provocó la ruptura de la familia. Jason abusó de la confianza que le tenían y hasta ejercía autoridad sobre los niños”, dijo el juez Freddy Sandí.

Y el juez Sandí añadió: “Se llevó a un punto en que Jason hizo pensar a la niña que lo que le hacía era normal, se les puede reprochar a los padres no ser más desconfiados, pero no ser cómplices ni que existiera incumplimiento de la patria potestad. Ellos siempre estuvieron atentos a sus hijos, así lo vinieron a decir los maestros y otros testigos”.

Durante la sentencia también se dijo que Jason golpeaba al hermanito de la niña. Una vez le pegó con una faja, otra con un palo e incluso en un momento lo amarró a una silla y le puso un cable con electricidad.

Quieren a sus hijos

Los padres de la niña se abrazaron al salir de los tribunales luego de conocer el fallo.

El papá de la menor aseguró que Jason es un lobo disfrazado de cordero.

La pareja pide que el PANI les devuelva a sus hijos para ver si pueden retomar sus vidas.

“Hemos vivido dos años de sufrimiento separados de nuestros hijos injustamente porque nosotros éramos inocentes”, dijo Badilla.

Valverde aseguró que hay que ser más recelosos con las personas a quienes se les encarga el cuido de los hijos.

Los hermanos Rojas tendrán que descontar ocho meses de prisión preventiva.

Silvia Coto

Silvia Coto

Periodista de sucesos y judiciales. Bachiller en Ciencias de la Comunicación Colectiva con énfasis en Periodismo. Labora en Grupo Nación desde el 2010.

En beneficio de la transparencia y para evitar distorsiones del debate público por medios informáticos o aprovechando el anonimato, la sección de comentarios está reservada para nuestros suscriptores para comentar sobre el contenido de los artículos, no sobre los autores. El nombre completo y número de cédula del suscriptor aparecerá automáticamente con el comentario.