La doctora española María Aurora Valenzuela Garach estaría enfrentando problemas de salud luego de enterarse que la Fiscalía le abrió una causa penal por el supuesto delito de ejercicio ilegal de la profesión.
Valenzuela es una de las testigos aportadas por la defensa en el juicio por el crimen de la anestesióloga María Luisa Cedeño Quesada en el hotel La Mansión Inn, en Manuel Antonio de Quepos.
Ante esta situación, el debate quedó suspendido lo que resta de esta semana y seguirá hasta el próximo lunes 30 de enero con la declaración de la médica desde España, por medio de videoconferencia, pues ella se fue de Costa Rica luego de enterarse de su investigación en su contra.
El abogado Erick Gatgens, defensor de uno de los imputados en este caso, de apellidos Miranda Izquierdo, se encargó de traer a la doctora Valenzuela como testigo y dio a conocer las supuestas dolencias que tiene la española.
“En virtud de la actuación temeraria por parte del Ministerio Público (se refiere por abrir una investigación contra la doctora Valenzuela), esto le generó a la señora Valenzuela Garach una serie de consecuencias negativas en su salud, se vio afectada emocional y físicamente”.
“Ante la amenaza grave que sufrió, se vio obligada a abandonar el país”, señaló Gatgens.
Valenzuela regresó a su país el jueves anterior luego haber comenzado con su declaración en el debate un día antes, ya que durante la mañana de ese día trascendió que a la española la investigarían por no estar inscrita en el Colegio de Médicos ni en el Colegio de Odontólogos de Costa Rica para ejercer en suelo tico y ser perito del juicio.
Gatgens dijo que contaba con una epicrisis de la doctora Valenzuela, en la que en apariencia les señalaba sobre las alteraciones digestivas, afectación en la presión arterial, insomnio y problemas emocionales, todos generados por lo dicho por la Fiscalía en contra de ella.
A Valenzuela le recomendaron tomar cinco días de reposo.
Investigación en proceso
Este lunes la Fiscalía confirmó que hay un expediente abierto contra la doctora, este caso es el número: 23-000156-0175-PE que se lleva en Goicoechea.
Pese a existir una causa abierta, Grettel Rosales, representante de la Fiscalía, dijo que no tienen ningún problema en seguir escuchando la declaración de la doctora.
Valenzuela sí le hizo saber al abogado Erick Gatgens que quería saber sobre su condición en Costa Rica antes de continuar con las declaraciones.
“Esta perito será recibida en este juicio, se trata de una declaración fundamental para esclarecer la verdad de los hechos, se trata de la perito más importante de la defensa, por lo cual no es casualidad que el Ministerio Público, la parte querellante y actora civil, hayan hecho todo el esfuerzo para impedir que ella declarara”, manifestó Gatgens.
Juan Marcos Rivero, abogado de la familia Cedeño, dijo que en 30 años es la primera vez que ve una situación en la que la testigo simplemente no llegue más al juicio y que diga que lo hará por videoconferencia. Señaló que si un costarricense lo hace, lo mandan a traer con la Fuerza Pública hasta el Tribunal Penal.
“Es la primera vez que se confunde un dictamen pericial con rendir una opinión técnica que perfectamente pudo haber hecho la doctora en su carácter de opinión personal, como catedrática, profesora o lo que quiera, pero si ejerce como perito en Costa Rica hasta donde yo sé siempre se ha hecho la distinción entre dar un peritaje y rendir una opinión”, manifestó Rivero.
“De un momento a otro desaparece de la escena nacional y se va del país, esta es la primera vez que veo que un testigo o un perito ante la orden de un Tribunal de la República induce a error al Tribunal sobre su capacidad de deponer y simplemente de manera inconsulta desaparece de la escena y se va del país”, sostuvo Rivero.
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Valenzuela fue llevada al juicio para desacreditar parte de la versión del único odontólogo forense de Costa Rica, que liga a Miranda Izquierdo y al empresario holandés de apellido Bodaan con las mordidas que quedaron en el cuerpo de la doctora María Luisa Cedeño Quesada.