En las redes sociales, en grupos de WhatsApp y en medios de comunicación, a diario se ven casos de personas desaparecidas, en una gran mayoría son jóvenes. Afortunadamente, el 99% finalmente aparecen.
Así lo dio a conocer el investigador Eddy Ulate en la Feria OIJ.
El agente asegura que todos los días reciben muchas denuncias por desapariciones y afortunadamente la mayoría se resuelven.
Aseguró que es muy importante tener presente que si una personas cercana a uno desaparece, no hay un plazo para denunciar, hay que ir de inmediato al OIJ.
Eso sí, dice que aunque cualquiera puede denunciar, les ocurre que a veces es alguien que pasa sin ver a una persona durante semanas y en el momento en que decidió buscarla no la encontró y alertó a las autoridades, pero resulta que en realidad nunca estuvo perdida, por lo que es importante que el que denuncie ojalá viva con esa persona y acuda porque está detectando algo inusual.
“Es muy importante tener una foto reciente, no de hace cinco o 10 años, porque las facciones de las personas cambian muchísimo”, dijo, además de que el denunciante debe saber los datos del desaparecido.
Para los investigadores, es muy importante saber dónde fue vista por última vez, además información médica, si toma algún tratamiento o consume drogas.
Además deben suministrase los perfiles en las redes sociales y ellos se encargaran de difundir las fotos a los medios de comunicación.
Datos y contactos
Ulate dio unos consejos buenísimos para los padres que dejan sus hijos al cuido de una niñera, como pedir todos sus datos y verificarlos, además de la hoja de delincuencia.
“Es necesario conocer el domicilio y estarlo verificando, para saber dónde vive, ir a dejar a esa personas de vez en cuando por si en algún momento se lleva al menor”, dijo.
Los casos que más llaman la atención son las desapariciones de los adolescentes, por lo que el experto asegura que los padres tienen que conocer sus círculos cercanos de amigos, tener los contactos de los padres de esos amigos. Si su hijo le pide permiso para ir a un lugar, en la medida de lo posible confirmar que va para ese lugar, y siempre tener información actualizada del colegio, no solo números, sino también horarios de las clases.
Muchos de esos casos terminan siendo fugas de hogar, pero Ulate aseguró que a todos se les presta inmediata atención.
Para los adolescentes que están enfrentando algún problema, el PANI tiene la línea 1147 para conversar con ellos.
El investigador asegura que se topan con casos en que el desaparecido no quiere ser encontrado, por lo que ellos cumplen con informarle al denunciante que apareció, pero que no pueden indicarle la ubicación porque esa persona (mayor de edad) no quiere.