Madre e hija cumplieron deseo de papá policía

El policía Jeffrey Barboza Sandí siempre se preocupó por dar lo mejor de sí y buscaba la manera de ayudar a quienes lo necesitaran.

Antes de morir le comentó a su esposa Hellen Rojas Herrera y a su hija Emily que había conocido a una familia, vecina de Bijagual de Acosta, que vivían en muy malas condiciones y que necesitaban una casa digna.

Se trataba de Gerardo Sánchez y su esposa, Katherine Mora, sus dos hijas María Fernanda, de siete añitos, y Marilú, de dos, además de la abuelita. Jeffrey sacó días libres y junto con otros uniformados se unieron para hacerles una casita.

"Él estaba feliz por hacer algo por esa familia, pero aún así deseaba seguir ayudándolos, un día me dijo 'amor, ellos no tienen un televisor y nosotros tenemos dos', él quería ver que estaban bien", recordó Hellen.

Jeffrey no logró llevarles el televisor porque murió al caer a un guindo con la patrulla que manejaba, el fatal accidente ocurrió en La Cruz de Guaitil de Acosta, el 8 de setiembre del 2014.

Sin embargo, tres meses después de su muerte, Hellen y Emily cumplieron el deseo de Jeffrey y le llevaron a la familia el televisor.

Además, Jeffrey planeaba ese año sacar plata del aguinaldo y comprarle regalos a las chiquitas de la casa, este deseo también se lo cumplieron.

"Era una persona con un gran carisma, su nobleza y entusiasmo fueron parte de su herencia, son las cosas buenas que siempre recordamos de él", expresó Hellen.

Madre e hija recuerdan con cariño a la familia Sánchez Mora.

Algunos de sus compañeros de delegación en ese momento lo recordaron como un ángel preocupado por los demás, quien solo esperaba como respuesta una sonrisa de los que ayudaba.