Doña Ana María Matarrita enfrenta el dolor de haber perdido a su hijo, quien fue atropellado por un conductor que se dio a la fuga y que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) anda buscando.
Su hijo era Celso Méndez Matarrita, de 32 años, quien dejó a su familia destrozada y a cuatro hijitos de 1, 4, 7 y 10 añitos.
Doña Ana nos contó que su hijo se dedicaba a vender tours y que tenía mucho potencial para ese negocio.
“Celso era una persona que tenía el escudo de la bondad, nunca conoció el rencor, ni el odio, era una persona admirable que se quitaba lo que tenía y se lo daba a quien fuera, siempre decía: ‘Dios provee, Dios es bueno’. Mi hijo tenía una gran sonrisa y unos ojos que siempre le brillaban”, comentó la mamá.
Pero la vida le cambió por completo a esta familia el pasado 15 de abril.
“Siempre lo iba a dejar al trabajo, lo dejé en el parqueo, ese día fue igual, pero un amigo del que me voy a reservar el nombre fue por él y se lo llevó, no sabemos si fue a trabajar o no, ni tampoco sabemos por qué se lo llevó, mi hijo era un muchacho muy casero siempre del trabajo se venía para la casa. Sus hijos viven en mi casa, vivimos todos juntos, pero ese día tenía que ir por unas medicinas y cuando llegué eran las 7:30 de la noche y me dice mi mamá (abuela): el niño no ha llegado, y él siempre lo más tarde que llegaba era a las 4 de la tarde”, dijo doña Ana.
La abuelita de Celso siempre hacía una oración cuando él se iba para el trabajo y lo recibía con otra cuando llegaba por lo que para ella no era normal el retraso.
“En ese momento sentí algo en mi corazón, no le puedo explicar qué fue”, dijo la mujer que es vecina de Palmira de Carrillo, en Guanacaste.
Doña Ana empezó a averiguar qué ocurrió con su hijo y se enteró de que él se fue con un amigo, porque lo llamaron para preguntarle si sabía algo de Celso. Además, él les dice que dejó a Celso porque estaba inconsciente y se fue, pero no le dio más detalles, solo le aseguró que lo dejó a 200 metros de Huacas.
La mamá desesperada fue a buscarlo para recogerlo y llevarlo a casa.
“Me voy a buscar a mi hijo vivo, yo lo que iba era a recogerlo, llegamos donde él nos dijo y a los 200 metros no había nadie, lo volvimos a llamar y nos dijo que lo buscáramos camino hacia Matapalo, yo tenía el cuerpo y las piernas en un puro temblor, por la angustia me quería morir, antes del cruce veo como unos pies y unas cintas amarillas y le digo a mi hija ese es tu hermano”, narró doña Ana María.
En ese momento, la mamá se enteró de que su hijo ya no estaba vivo, que un carro aparentemente lo atropelló.
“Ya estaba ahí, la Policía no me dejó acercarme. El amigo de mi hijo no me ha dado ninguna explicación, pero él sabía lo que estaba pasando y lo dejó solo, mi hijo andaba con otra camiseta muy distinta a la que salió de la casa. El amigo me devolvió la mochila y la billetera vacía, desde ese día no he podido asimilar esto, mi hijo era mi consentido, era mi bebé, siempre me decía mi china guapa, me decía que quería estar conmigo, yo lo chineaba mucho”, dijo la mamá.
Doña Ana asegura que el amigo de Celso lo conocía desde pequeño y ella no entiende por qué no la llamó ni por qué no le ha dado la cara. Sin embargo, al igual que su hijo, todo esto se lo ha dejado a Dios.
El OIJ dio a conocer un video para ubicar al chofer de un pick up como sospechoso de atropellar y matar a Celso. La investigación está en manos de la Subdelegación Regional de Santa Cruz.
“Se solicita la colaboración a la ciudadanía para individualizar el vehículo que se observa en la grabación, ya que la persona que lo conducía figura como sospechoso del delito de homicidio culposo. Los hechos ocurrieron a eso de las 7:3O de la noche del 15 de abril del 2023, en vía pública, en Santa Cruz, en Guanacaste, en el cruce de Brasilito, en Cabo Velas cuando en apariencia el sospechoso a bordo del vehículo habría atropellado al hombre, lo que le causó la muerte. El conductor escapó del sitio.”, detalló el OIJ.
“Solo espero que Dios toque el corazón del sospechoso y se entregue”, dijo Matarrita.
Para esta madre es muy duro ver a sus nietitos que han tenido que enfrentar la muerte de su papito a quien amaban. Ella se ha convertido en el soporte de su nuera. Celso era un buen vendedor de tours y eso les permitía vivir bien.
“La más pequeña (año y ocho meses) llora por su papá y hasta bajó de peso, el de cuatro años es al que más se le ha dado, él y la mayorcita de mis nietas están recibiendo ayuda sicológica”, dijo.
La mamá contó que Celso estaba muy ilusionado con la fiesta de su hijo, de 4 años, que cumplía tres días después del accidente, justo el día que lo enterraron. Además, soñaba con comprarse una lancha.
La familia de Celso pide ayuda para dar con el conductor y que llamen al 800-8000645 o al WhatsApp 8800-0645 del Centro de Información Confidencial del OIJ.