“Si mi hermano hubiese sido un asaltante yo diría: ‘¡se lo buscó!’, pero no eran asaltantes; imprudentes sí lo fueron porque andaban en moto tomados y mi sobrino iba sin casco”.

Así se expresó Maribel Rivera Fernández sobre la muerte de su hermano Cristian Rivera Fernández de 45 años y de su sobrino Andrei Gustavo Rivera de 27, quienes perdieron el control de la moto cuando pasaban por un puente y murieron al golpearse contra las piedras del río Durazno, en el cruce de Dulce Nombre y La Gallera en Coronado.

Cuando la Fuerza Pública dijo que los iba persiguiendo, muchas personas los señalaron como asaltantes, sin embargo, doña Maribel afirma que no eran ladrones y huían por andar tomados y el acompañante sin casco.

“Nosotros somos vecinos de El Rodeo de Coronado, mi hermano estuvo tomando en la casa y mi sobrino se le unió, luego decidieron salir, no sé hacia dónde, pero usted sabe que cuando una persona está tomada es majadera y nada lo detiene”, expresó doña Maribel.

Incluso la hermana supo que les intentaron quitar las llaves de la moto, pero al final lograron salir de la vivienda, asegura que media hora después de salir fue cuando ocurrió el accidente de tránsito.

“La moto era de mi hermano Cristian, él era agricultor y también trabajaba en lecherías, él no acostumbraba a manejar tomado y si salía en moto lo hacía con la esposa”, dijo la hermana.

“Siento que el susto de mi hermano fue que no querían que le quitaran la moto, no andar con el casco y tomados fue lo que lo llevó a no acatar lo que le decía la policía”, manifestó.

LEA MÁS: Tío y sobrino perseguidos por la policía mueren al caer en moto desde puente

Sin armas

La pariente agregó que a ellos no les encontraron armas de fuego.

Versión que confirmó la sección de asaltos del OIJ por parte de la oficina de prensa. Según las autoridades ninguno de los dos hombres tenía cuentas pendientes con las autoridades y tampoco los relacionan con ningún tipo de asalto.

Cristian dejó cuatro hijos y otros dos de crianza, todos ellos adultos; mientras que Andrei dejó un hijo de seis años y un bebé.

Doña Maribel le pide a los conductores no exponerse ni arriesgar otras vidas al manejar.

“Muchas personas hablaron mal de mis parientes, pero ellos solo salieron rápido y ahora sufrimos la ausencia de ellos, ojalá ninguna otra persona se arriesgue y atienda el llamado de las autoridades”, manifestó.

La familia recogió la tarde de este jueves las pertenencias que dejaron los fallecidos y la moto la llevaron a una chatarrera.

“En el OIJ nos dijeron que en unos quince días tenían el informe final policial, pero desde ya estaban descartando que no estaban relacionados con algún robo”, concluyó.

El funeral de ellos fue el martes 30 de abril en la iglesia de Coronado y los enterraran en el cementerio de La Trinidad de Moravia.