Lo que tenía que ser un día de alegría y celebración para doña Marina Ruiz Muñoz terminó por convertirse en el más tristes de su vida.
Ruiz, en su cumpleaños número 69, tuvo que enterrar a su amada hija Lizbeth Ruiz Muñoz, de 49 años.
Lizbeth, conocida como “Betty” en La Fortuna de Bagaces, en Guanacaste, fue asesinada la noche del pasado domingo de varias puñaladas, aparentemente, por un nicaragüense de apellidos Sevilla Salas, de 23 años.
Betty defendió a su esposo, don Leopoldo Rivas, de 62 años, del extranjero, con el que habían estado tomando unos tragos.
Aparentemente Sevilla amenazó con matar a Rivas si no le daba la platita que recibió por su pensión de invalidez.
Pueblo unido
Aryery Ruiz, hermana de Lizberh, contó que Betty fue sepultada la noche de este lunes 4 de octubre en el cementerio comunal de La Fortuna de Bagaces.
“Como a las tres de la tarde trajeron el cuerpo de ella, entonces la velamos un ratito donde mis tíos, aquí mismo en La Fortuna. La misa se retrasó porque el sacerdote tuvo que ir a otro lugar alejado a dar una misa.
“La misa de mi hermana se hizo hasta las siete de la noche y de ahí se llevó al cementerio para darle santa sepultura, eso fue pasaditas de las ocho de la noche”, recordó.
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Aryery contó que su familia se sintió muy acompañada en ese momento tan difícil, pues decenas de vecinos llegaron a despedirse de Betty. “Le podría decir que prácticamente fue todo el pueblo”, mencionó.
Cumpleaños muy triste
Ruiz contó que Lizbeth visitaba a su mamá a diario y este domingo que pasó no fue la excepción, pues compartieron un rato juntas ante de que ocurriera la tragedia.
“Dice mi mamá que el domingo hicieron un arrocito con pollo, porque ella (doña Marina) cumplía años el lunes, entonces invitó a mi hermana para que celebraran juntas por adelantado, que se iba a imaginar uno que horas después iba a pasar algo tan terrible”.
Aryery dice que a ella le tocó la difícil tarea de darle la lamentable noticia a su mamá.
“Me decía que no podía creerlo, porque mi hermana había estado almorzando con ella en la casa por el cumpleaños”.
Pese al enorme dolor que sentía en su corazón, la señora sacó fuerzas de donde no tenía para acompañar a Lizbeth hasta el cementerio.
En cuanto a Sevilla, quien fue detenido la misma noche del crimen, el Ministerio Público informó que este martes se realizó la audiencia de medidas cautelares en su contra, pero al cierre de esta nota la audiencia no había terminado.