Leonel Webb Urbina, de 54 años, fue apuñalado cinco veces por su expareja dentro de una casa en Esparza, Puntarenas.
La sospechosa, de apellidos Sandino Cabezas y 60 años, fue detenida por oficiales de la Fuerza Pública. De acuerdo con la oficina de prensa del OIJ, la pareja mantuvo una relación sentimental y ahora se encontraban separados.
Una fuente policial afirmó que Sandino era víctima de agresión doméstica y esa misma información dieron algunos familiares de la mujer.
Webb era nicaragüense y vivía en Costa Rica desde hacía varios años. Ya contaba con residencia y de acuerdo con su información personal el domingo 10 de octubre habría cumplido 55 años.
Este miércoles a las 11 de la noche, la policía recibió información de un problema dentro de una vivienda en El Rosal de Esparza.
“Al parecer, Webb llegó a la casa y aparentemente discutió con la mujer, que lo hirió con un puñal en al menos cinco ocasiones. Webb falleció en el sitio, presentaba heridas en la cara, el abdomen y la mano izquierda”, detalló el boletín judicial.
Problemas desde hace años
Adela Sandino, hija de la sospechosa, afirmó que su mamá padecía constante violencia doméstica y que se enteraron de la tragedia porque una prima que vive detrás de la casa donde ocurrió el homicidio oyó una discusión y fue de las primeras en saber lo que había pasado.
“Sé que mi mamá también llamó a mi tía, le dijo que este hombre la llegó a ofender, discutieron y luego pasó lo que pasó”, dijo Adela.
La sospechosa no intentó escapar, se quedó donde estaba esperando que llegara la policía.
Adela Sandino dijo que su mamá tiene problemas de alcoholismo y que pasaba lo mismo con Webb Urbina.
Agregó que su madre había denunciado al hombre, a quien le habían puesto medidas cautelares y tenía prohibido acercarse a ella; sin embargo, él las incumplía, llegaba a la propiedad y buscaba la manera de entrar.
En una de esas, dijo Adela, su mamá fue golpeada en la cabeza con una macana y necesitó que la viera un médico. Contó además que muchas veces la vio con moretones.
“No tengo claro cómo comenzó la relación entre ellos, ni dónde se conocieron, sí estuvieron juntos aproximadamente cuatro años, en los que ella fue víctima de violencia, de violación; este señor la encerraba, la golpeada, la intimidaba. Ella, por miedo, no hacía nada”, sostuvo.
LEA MÁS: Llamada por violencia doméstica permitió capturar a uno de los 10 más buscados del OIJ
Dice Adela que varias veces ella le pidió a su madre que se fuera a vivir con ella pues sabía que sabía que la pareja corría peligro.
“Pero ella no quería dejar su casa botada, sabíamos que él iba en la noche y se metía sin el consentimiento de ella, mi mamá es muy delgada y no se defendía”, comentó.
Manifestó que Webb trabajaba en un aserradero y la señora es ama de casa. Cree que la agresión constante que sufría su madre la llevó a romper el circulo de la manera más traumática.
“Les pido a las autoridades que analicen bien el caso de mi mamá y de este sujeto por medio de los expedientes porque ahí hay información de toda la violencia que sufrió, nunca antes había vivido en violencia hasta que lo conoció a él”, afirmó Adela.
A las 5 p.m. de este jueves la Fiscalía Adjunta de Puntarenas informó que se mantenía atendiendo el caso y que no daría detalles.