El obispo de la diócesis de San Isidro de El General, fray Gabriel Enrique Montero Umaña, se recupera muy bien del accidente de tránsito que sufrió, incluso ya está trabajando de nuevo y pronto volverá a dar misa.
El sacerdote Elí Quirós López, vicario episcopal de comunicaciones de la diócesis, contó que el religioso ya no siente dolor y que está muy contento por poder retomar sus actividades pastorales.
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“Monseñor se ha recuperado bastante bien, de hecho ya está trabajando en la Curia, asistiendo a reuniones y atendiendo personas. Se espera que ya pronto pueda volver a celebrar la eucaristía”, detalló el cura.
A inicios de marzo, el obispo tuvo que ser internado para tratarle una hemorragia interna, esta se dio por la fractura de tres costillas que sufrió en el accidente de tránsito, pero esa lesión ya fue superada por el religioso.
El sacerdote López asegura que, en todo momento, monseñor mantuvo una actitud muy positiva y eso ayudó bastante en la recuperación.
El suceso en el que resultó herido el obispo, de 74 años, ocurrió el pasado 21 de enero. Él viajaba en un carro por Cuesta López, en Buenos Aires de Puntarenas, cuando perdió el control del vehículo, se salió de la calle y se volcó.
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Montero iba con dos personas más, una de ellas sufrió fracturas en la clavícula y en la muñeca, mientras que el otro acompañante solo sufrió golpes leves.
El accidente ocurrió cuando ellos regresaban de un viaje pastoral en el que habían entregado a un sacerdote la responsabilidad de la parroquia Inmaculada Concepción de Boruca.