Los dos hombres asesinados en la Cuesta de Corredores la tarde del martes eran costarricenses y cuñados, según informó el OIJ este miércoles.
El crimen ocurrió en unas cabinas que están a un kilómetro de Paso Canoas.
Según el director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), Wálter Espinoza, las víctimas son Minor Chacón Varela, de 54 años, y Cristian Corrales Zúñiga, de 38.
Corrales tenía antecedentes y varias pasadas por tráfico de drogas.
Los cuñados llegaron hasta las cabinas en el carro de la mamá de Cristian ya que, al parecer, fueron citados en ese lugar para hacer un negocio. Las cacinas funcionan ilegalmente y no lleva registro de huéspedes.
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“Las cabinas fueron alquiladas por dos hombres panameños, quienes, según nos indican, discutieron con las víctimas, les dispararon y luego huyeron hacia Panamá”, dijo Espinoza.
Cuando las autoridades llegaron ya ambos hombres habían fallecido. Minor tenía heridas en la espalda y en la pierna derecha y Cristian en la cabeza. Los investigadores recogieron casquillos de arma calibre 22, una pistola y los celulares de los fallecidos.
Los sospechosos se llevaron el carro en que viajaban los cuñados y lo dejaron a unos 15 metros de la zona fronteriza, pero del lado panameño. El OIJ tuvo que pedir a la policía de ese país que se encargue de revisarlo y de buscar pistas.
Las autoridades sospechan que el doble homicidio estaría relacionado con el tráfico de drogas.
Los cuñados eran vecinos de San Vito de Coto Brus y se dedicaban al comercio.