La Policía fue alertada la noche del sábado de que en un bar clandestino, en Bella Vista de Fray Casiano, Puntarenas, 15 personas se estaban pegando un fiestón.
Una llamada confidencial indicaba que en el bar El Gordo la gente estaba aglomerada y que había de todo menos burbujas.
Según informó el Ministerio de Seguridad Pública, cuando los oficiales llegaron encontraron a 14 adultos y un menor de edad que se pusieron chivas de ver la presencia policial.
La fachada del sitio es la de una casa, pero al ingresar solo hay una barra con bancos, mesas y sillas y sillones. Además les decomisaron 204 botellas de distintos licores.
Los oficiales clausuraron el sitio, tomaron los datos de los presentes y mandaron a todo el mundo para la casa.
El dueño del negocio no tenía permiso para vender bebidas alcohólicas, por lo que se expone a una multa municipal.
Además, en La Carpio, en La Uruca, San José, un grupo de jóvenes fue sorprendido consumiendo licor en la calle, por lo que los oficiales los identificaron y el licor fue destruido.
Las autoridades piden a la población que denuncie este tipo de situaciones al 911 o a la línea 1322, pues esta semana es clave para tratar de mermar los contagios de Covid-19 que se han ido disparando.
Según el Ministerio de Seguridad Pública, hasta el 10 de julio habían intervenido en 11 fiestas.