Un reo que gozaba del beneficio de libertad condicional pensó que irse a vivir a Guanacaste era la mejor idea para dejar atrás a quienes intentaron matarlo, sin embargo, la muerte lo siguió hasta su nuevo hogar.
El hombre murió asfixiado con unas gasas plásticas que unos maleantes le pusieron alrededor del cuello luego de haberse metido a la fuerza a la casa que alquilaba.
El OIJ dio a conocer el caso este lunes, pero los hechos ocurrieron la mañana del domingo en San Pedro de Zapotal, en Nandayure de Guanacaste.
Las autoridades identificaron al fallecido como Michael Campos Mejicano, de 36 años.
El Ministerio de Justicia informó que Campos tenía una sentencia de ocho años por narcotráfico, pero salió del Centro de Atención Institucional de Puntarenas el 3 de mayo de 2018 luego de recibir el beneficio mencionado.
Balazos lo espantaron
El OIJ indicó que Campos se fue a vivir a Guanacaste hace ocho días debido que unos sujetos lo agarraron a balazos en un bar de Chomes, en Puntarenas, el 1 de diciembre de 2018. Michael quedó inválido producto de esa balacera.
Con respecto al homicidio, todo ocurrió a eso de las 8 a.m. cuando tres maleantes se metieron a la casa de Campos, quien estaba junto a dos amigos que lo ayudaban a pasarse de vivienda.
Los delincuentes amarraron, amordazaron y encerraron a los amigos del reo en el baño, mientras que a él lo dejaron en una habitación.
A eso de las 2 p.m. uno de los hombres que estaba encerrado en el baño logró soltarse para pedir ayuda, pero cuando las autoridades llegaron ya no había nada qué hacer por Michael.
Los investigadores están tratando de determinar si el crimen se dio por un ajuste de cuentas o si se trataría de un asalto, ya que los maleantes se llevaron ¢40 mil y tres celulares.