Manejar tractor es para muchos una forma más de ganarse la vida, pero para don Gerardo Vargas Granados, de 60 años, lo era todo. Era una pasión que lo acompañaba desde que tenía memoria.
Don “Gera” perdió la vida el pasado jueves al quedar sepultado por una gran cantidad de tierra mientras manejaba un tractor en una propiedad de la empresa Fasao en San Miguel de Santo Domingo de Heredia.
Ana Mercedes Vargas, sobrina del señor, cuenta que don Gera murió haciendo lo que amaba y saber eso, hasta cierto punto, le da un poco de tranquilidad a la familia.
Doña Ana no sabe cuándo se inició esta pasión de su tío por la maquinaria pesada, pero desde siempre lo recuerda montado en un tractor y con una sonrisa de oreja a oreja.
“Él amaba las dragas y toda esa clase de maquinaria desde que nació, toda la vida trabajó en eso, era el trabajo que más amaba. Es como a los aviadores, que les apasiona subirse a un avión, a él le encantaba andar en esas máquinas”, recordó la sobrina.
Formal y serio
Vargas recordó a su tío como un hombre “seriecillo”, pero que con la familia y con los seres queridos se soltaba un poco más a hablar y a vacilar; sin embargo, siempre se mantenía como alguien muy formal.
Cuenta la sobrina que en los últimos años ella había perdido el contacto con su tío, pues él decidió irse de su natal Batán de Limón para vivir primero en Guanacaste y finalmente en San Antonio de Desamparados, San José.
“Vivió aquí un tiempo pero luego se fue a Guanacaste donde vivió por bastante tiempo. Luego de que el papá y la mamá de él se murieron no volvió a Batán, luego supimos que estaba viviendo en San José", añadió.
En cuanto al accidente Vargas dijo que duda muchísimo que se ha haya dado por alguna mala maniobra de su tío pues él era un gatazo para manejar esos chunchones. Piensa que fue una mala jugada del destino.
“Sí es cierto que era el primer día en ese trabajo, pero con el señor que lo contrató había trabajado mucho tiempo. Él tenía mucha experiencia manejando esa maquinaria”.
Golpe rudísimo
La noticia sobre la muerte de don “Gera” fue un golpe durísimo para su familia pues, según contó doña Ana, nadie pensaba que la persona involucrada en ese terrible accidente fuera él.
“Yo me enteré hasta el otro día (viernes) porque ese jueves pasé todo el día en el hospital con mi hijo y no vi nada de las noticias, ni siquiera sabía que había alguien desaparecido. Fue una noticia muy impactante para toda la familia, se nos dio mucho a todos, pero especialmente a mi mamá y a mi tía la que lo veló en la casa”, mencionó.
La familia de don Gerardo le dio el último adiós en Batán el sábado 23 de junio.