El nombre de Ricardo Alem León, quien ya una vez fue condenado a 20 años de prisión por tráfico internacional de drogas, volvió a ser noticia este miércoles cuando fue sorprendido por las autoridades con ¢8 millones de dudosa procedencia.

El Ministerio de Seguridad Pública y el OIJ confirmaron que los hechos ocurrieron la tarde de este miércoles 6 de enero durante un operativo de carretera en San Bosco de Ciudad Colón, en Mora.

Los oficiales detuvieron un carro Toyota Yaris en el que viajaba Alem junto a otro hombre apellidado López y al revisarlo encontraron ¢8 millones repartidos en varios fajos de billetes.

“Al consultarles sobre el origen del dinero no dieron una razón de dónde provenía, por lo que se coordinó con la Sección de Legitimación de Capitales y se decomisó el dinero”, detalló la oficina de prensa del OIJ.

El Ministerio de Seguridad Pública informó que el carro fue revisado por un perro de la unidad canina, el cual encontró aparentes rastros de droga, pero dentro del vehículo no se halló ningún paquete sospechoso.

La Policía Judicial indicó que Alem y López fueron dejados en libertad mientras se investiga de dónde sacaron el dinero.

Vida criminal

Actualmente, Alem cumple una condena de 20 años que le fue recetada en el 2010 por tráfico internacional de drogas, pero desde enero del 2020 se encuentra fuera de prisión gracias a que recibió un beneficio carcelario.

Su vida criminal se dio a conocer en 1990, cuando fue condenado a 15 años por lavado de dinero, cuando la Policía halló $760 mil en un maletín de un socio suyo, pero el fallo fue anulado.

En ese momento él era el representante de Costa Rica ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).

En 1995, Alem fue detenido por la Administración para el Control de Drogas de los Estados Unidos (DEA) en Miami, pues lo vincularon con el tráfico de 15 kilos de cocaína a ese país, por lo que fue sentenciado a 9 años.

Fue repatriado en el 2001 para terminar de cumplir su condena en el país y en el 2005 obtuvo la libertad condicional, sin embargo, en el 2008 fue capturado por orden del Ministerio Público, el cual lo señaló como el líder de una red narco que enviaba cocaína a países de Europa y Guatemala.

Finalmente, El 21 de diciembre del 2010, el Tribunal de Juicio de Goicoechea lo condenó a 20 años de cárcel por tráfico de drogas.