Tratan de frenar calvario de los vecinos de una conocida urbanización en Desamparados

Los vecinos de la urbanización Valladolid, en Desamparados, recibieron muy buenas noticias, ya que las obras de estabilización en ese lugar, donde hay un gran deslizamiento, dieron inicio.

Cabe recordar que en esa zona hay un gran deslizamiento, el cual destruyó al menos 27 casas en el 2020, estas estaban ubicadas al costado sur de la Urbanización Valladolid en Los Guido-Desamparados.

La Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) está realizando una inversión de ₡2 mil millones en este proyecto. El pasado 12 de diciembre fue cuando se iniciaron los trabajos con la llegada de maquinaria para la construcción de una pantalla de concreto reforzado, anclajes en el terreno, un relleno estabilizador, una pantalla de suelo y otras obras complementarias.

El objetivo principal de esta obra es evitar que el deslizamiento se extienda hacia otras zonas, brindando mayor seguridad y protección a las familias afectadas. También se busca prevenir el taponamiento del río Jorco.

Alejandro Picado, presidente de la CNE, destacó la importancia de estas obras para garantizar la seguridad de las personas y proteger sus hogares.

Por su parte, Karen Torres, coordinadora del Comité Comunal de Emergencias de la Urbanización Valladolid, expresó su satisfacción con el proyecto y destacó la organización comunitaria llevada a cabo. Se realizaron censos para conocer las necesidades de los residentes, se enseñaron rutas de evacuación y se establecieron puntos seguros de reunión. Además, se mantienen canales de comunicación con los vecinos para mantenerlos informados.

Además de las obras de estabilización, las autoridades municipales y la CNE realizan un monitoreo constante del área afectada para detectar cualquier cambio en su comportamiento.

Se espera que las obras concluyan a mediados del próximo año.

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Antecedentes

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Desde julio del 2020 inició el deslizamiento. Las primeras evidencias fueron grietas en la carretera, daños estructurales en las viviendas, tuberías y tendidos eléctricos, hasta finalmente la destrucción de varias casas. Estas afectaciones con el paso del tiempo se han ido incrementando, provocando que decenas de familias desalojen sus hogares ante el riesgo de vivir en esta urbanización.