Vecinos de Tarbaca, Acosta y San Gabriel siguen incomunicados

Yoseline Badilla tiene 20 años y vive en barrio El Carmen, en Tarbaca de Aserrí, pero desde el miércoles pasado no ha podido ir a su casa porque las lluvias han causado varios derrumbes que mantienen el paso complemente cerrado.

“Desde el martes en la noche ha estado lloviendo muy fuerte y empezaron a caer pequeños derrumbes sobre la calle, pero los iban quitando de una vez. El miércoles yo salí para mi trabajo en Tibás y en la tarde la tarde me subí al bus de regreso, pero cuando íbamos por Desamparados se detuvo un rato.

“Entre los mismo pasajeros empezaron a pasar fotos y mensajes de que no había paso para la casa, entonces el bus no nos podía llevar”, relató la muchacha.

Yoseline no tuvo más opción que llamar a una tía de ella que vive en Desampa y pedirle posada, ahí se ha estado quedando estos días.

“Me cuesta mucho habla con mi familia porque las líneas de comunicación están caídas. Muchísima gente está sin luz y sin agua y lo peor de todo es que hasta las pulperías están quedándose sin comida porque los camiones y carros repartidores no pueden llegar a descargar”, argumentó preocupada la muchacha.

Pero los vecinos de Tarbaca no son los únicos afectados, los pueblos de más adentro como Acosta, San Gabriel, Vuelta de Jorco y otras comunidades también está viéndola feísimo ya que tanto la vía principal como las entradas alternas están cerradas por culpa de la tormenta Nate.

Según contó Joseline, los propios vecinos se han armado con palas y picos para quitar la tierra de los derrumbes porque las autoridades nada que llegan.

Pese a eso, David Meléndez, jefe de emergencias del MOPT, asegura que ya ellos tienen maquinaria en la zona y esperan, a más tardar el sábado, habilitar el paso hasta Acosta.

“Una vez que lleguemos hasta ahí seguiremos quitando el montón de derrumbes que hay. Liberaremos poco a poco las comunidades. Esperamos pasar pronto a Puriscal, Parrita y todas esas zonas que también están incomunicadas”, explicó el jerarca.