“Lo que hizo fue un acto de amor, hasta me siento culpable porque él no tenía que resultar herido porque no era un problema de él”.
Esto lo dice Marlene Lazo, hermana de Bryan Lazo, quien recibió un balazo en las costillas al defenderla de su esposo, quien le apuntó e intentó matarla con un arma hechiza en plena calle de La Quebrada de Palo de San Carlos, en Alajuela.
El sospechoso del ataque es de apellidos Porras Villegas y 34 años.
Los fiscales de San Carlos presumen que Porras disparó contra Marlene para matarla, sin embargo, Bryan se interpuso y resultó herido.
Bryan permanece internado en el hospital San Carlos, donde se recupera; el martes fue operado y los médicos dicen que su condición es favorable.
Este miércoles en la tarde Porras fue llevado a una audiencia en el juzgado penal de la zona; el Ministerio Público pidió a los jueces que le pusieran medidas cautelares, pues es sospechoso de tentativa de femicidio y tentativa de homicidio.
Hombre agresivo
Marlene y Porras se casaron hace nueve años y son papás de un niño de 8 años. La pareja se separó hace dos meses y desde ese momento Porras perseguía a Marlene y le insistía en regresar.
Este martes en la mañana, Porras llegó de manera violenta a la casa de Marlene, forcejeó con ella, le quitó el celular y se fue.
Marlene cuenta que llamó a la policía por medio del celular de su hijo, luego se fue a los tribunales para denunciar la agresión y pedir medidas cautelares ya que temía por su vida. Durante el tiempo que estuvo en los tribunales, Porras la llamó al teléfono del hijo y le preguntó si le estaba poniendo medidas cautelares.
“No le quise decir, le dije que estaba buscando ayuda psicológica y cuando iba de regreso para la casa, mi mamá me llamó y me dijo que él (Porras) estaba merodeando el área, por lo que enviaría a mi hermano (Bryan) a recogerme”, recordó.
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Agregó que cuando se bajó del bus, vio que el hombre estaba al otro lado de la parada, ella debía cruzar y en ese momento Porras la llamó.
“Me dijo que me acercara para hablar, pero que a solas. Yo no quise, mi hermano le dijo que no, porque yo le tenía miedo por todas las cosas que ya había hecho y él dijo que estaba bien”.
"Empezamos a caminar para irnos, volví a ver para atrás y vi que él sacó dos tubos y empezó a armarlos, lo que pensé era que me iba a pegar, pero empezamos a correr y él vio que nos íbamos alejando, en ese momento empezó apuntarme, me di cuenta que no era un tubo, sino un arma”.
Marlene le dijo a su hermano que corrieran, pero él se devolvió para enfrentar a su excuñado y pedirle que dejara en paz a Marlene. Comenzó un forcejeo entre el hermano y la expareja y Marlene se devolvió para tratar de separarlos.
“Mi hermano me gritaba ‘¡Marlen, corra, déjeme, corra!’, cuando él (Porras) vio que iba a escapar hizo una detonación e impactó a mi hermano a un costado”, dijo.
Marlene es sobreviviente de violencia doméstica y espera que se haga justicia.