El deporte universitario de Estados Unidos está de luto luego de que el basquetbolista Deng Mayar, de apenas 22 años, falleció durante un paseo recreativo que terminó en tragedia en Utah.
El joven, considerado una verdadera promesa del baloncesto, se encontraba en el Blackridge Reservoir, en Herriman, cuando decidió nadar en compañía de un amigo. Mientras su compañero logró llegar a la orilla, Mayar no consiguió salir del agua y desapareció frente a los ojos de quienes estaban presentes. Horas después, equipos de rescate localizaron su cuerpo sin vida.
Mayar recién había llegado a la Universidad de Nebraska en Omaha (UNO), luego de destacarse en la Universidad de North Dakota, donde brilló con un promedio de 6.3 puntos y cuatro rebotes por partido. Su talento y entrega lo habían convertido en una pieza clave para su nuevo equipo y en una esperanza de futuro dentro del baloncesto universitario.
El entrenador de Omaha, Chris Crutchfield, no ocultó el dolor que embarga a toda la institución.
“Nuestro programa está devastado... Era una alegría estar con él y enriquecía nuestra cultura. Lo extrañaremos profundamente”, escribió en redes.
La propia Universidad de Nebraska, en Omaha, emitió un comunicado en el que envió sus condolencias a la familia del jugador y resaltó el impacto positivo que tuvo en su corta estadía. Su exequipo, la Universidad de North Dakota, también expresó estar “con el corazón roto” por la inesperada noticia.
College basketball star Deng Mayar killed in tragic drowning accident https://t.co/ZEfj8NNOxV pic.twitter.com/dw5eashruk
— New York Post (@nypost) August 18, 2025