Luis Díaz tuvo una acción que deja claro que, aunque no fue al funeral de su compañero Diogo Jota, sí sufre por su muerte.
El jugador colombiano fue el centro de críticas durante la semana pasada porque, a diferencia de la mayoría de sus compañeros del Liverpool, él no asistió al funeral del delantero portugués y, además de eso, se mostró muy feliz en redes sociales grabando bailes con algunos creadores de contenido.
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Esa situación hizo que le llovieran críticas y hasta lo trataran de mala persona, pero este jueves él quiso despedir a su amigo en la misa de los 7 días de fallecido, en la cual se le vio muy afectado.
Díaz fue a la ceremonia vestido de negro y al salir del lugar se le vio llorando, muy afectado, imágenes que se hicieron virales en redes.
En la misa también estuvo el portero Alisson Becker.