La increíble y picarona vida amorosa de la protagonista de Betty, la fea

A pesar de que la actriz colombiana Ana María Orozco sufrió muchísimo en el amor dándole vida icónico personaje de Betty, la fea, su historia real ha sido mucho más emocionante que la de Betty y don Armando.

La colombiana ha tenido una vida sentimental cargada de dramas, amores, conflictos y polémicas que la han seguido desde antes de que interpretará a querida Betty. Un video compartido en TikTok hace un recuento de las aventuras, amores y desamores de Ana María.

Todo empezó en 1995 con Julián Arango, colega con el que se casó en 1998 antes de que los dos fueran parte de la famosa telenovela, donde justamente su amor llegó al final. Él es que le daba vida al personaje de Hugo Lombardi, el diseñador de Eco Moda.

Aunque se dijo que fue culpa de los horarios y del exceso de trabajo, esa teoría se vino abajo cuando salieron los rumores de que Orozco había conocido a un fotógrafo que le robó el corazón, hecho que se confirmó meses después, cuando oficializó el divorcio con Arango.

Según un canal de chismes colombiano, Arango descubrió a la actriz con el fotógrafo en la cama, por lo que las grabaciones de Betty se volvieron un infierno para ambos.

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El amor con Pedro Franco le duró tres años, hasta que conoció a Martín Quaglia, un músico argentino del que quedó fechada, se convirtió en su segundo matrimonio y padre de sus dos hijas.

Con Quaglia la artista se mudó a Argentina donde empezó una nueva vida hasta que su corazón le volvió a hablar y se enamoró de otro compañero de trabajo, Maximiliano Ghione, con el que compartía románticos mensajes públicos y hasta se tatuaron juntos, pero de la nada terminó su relación en apariencia por culpa de ella, pues él terminó casi que aborreciéndola.

En la actualidad la actriz está soltera y enfocándose en volver a interpretar a Betty en la tercera temporada de la serie que saldrá el próximo año. Ya veremos si sigue con la costumbre de ligarse a algún compañero y luego, si te vi no me acuerdo.