Un platillo que estaba fuera del menú en primera instancia, se convirtió en la revolución de un restaurante mexicano y ahora es uno de los más buscados de sus clientes.

Hace dos años, en “La Fonda mexicana” decidieron ofrecer a sus comensales tacos de birria, como parte de los platos especiales del local, que se ofrecían una vez por semana, pero lo que no imaginaron sus dueños, es que este tipo de tacos se volvería todo un pegue.

Alberto Castro, dueño del local conversó con Tiempo Libre y destacó que antes de los taco de birria ofrecían tacos al pastor y tacos de cochinilla e incluyeron estos para variar el menú.

“En el restaurante tenemos unos 35 tipos de platos diferentes y nos gusta incluir platos especiales todas las semanas.

“Los tacos de birria los incorporamos al menú para atraer a la gente, pero fue tanta la demanda que volvimos a hacerlo una semana después y ya luego decidimos dejarlos. Pensamos que serían flor de un día, pero se han mantenido entre los más gustados”, destacó.

Este restaurante se ubica en Alajuela, en el Pacto de Jocote y abrió sus puertas hace 13 años. Los creadores fueron Alberto junto a su esposa Angélica Mendoza, una mexicana de la zona de Toluca, que llegó a Costa Rica hace 23 años.

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“Nosotros servimos acá un taco y es la misma cantidad que sirven en otros restaurantes cuando sirven dos tacos. Nuestras porciones son generosas y un plato con 4 unidades le sale en 4.800 colones″, afirmó.

El negocio es manejado por Alberto, su esposa y sus 4 hijos Jonathan, David, Emmanuel y Daniel, quienes colaboran con el servicio de entregas y atención al cliente.

Puro sabor

Angélica recordó que comenzaron con un local pequeño y la publicidad boca a boca fue fundamental para hacer crecer el negocio.

“Lo que buscamos en La Fonda mexicana es que las personas que prueben nuestros productos, los consuman con el mismo sabor y los ingredientes de los productos que se hacen en México.

“Tratamos de usar los mejores ingredientes, buscamos los chiles, los condimentos y todo para que sea comida auténtica mexicana y con las sopas pasa igual, no es nada comercial”, afirmó.

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Alberto añadió que a diferencia del país azteca, en su negocio cada platillo se hace sin chile o la cantidad de chile adecuada para dar sabor y si los clientes son amantes de lo picante, incorporan los distintos chiles en salsas y otras presentaciones.

“En México no todos los chiles son picantes, muchos se usan para dar sabor y color a los platillos. Otros pican un poco y ya luego hay productos muy picantes. Nosotros hacemos una salsa de chile habanero, chile de árbol y cada cliente escoge la cantidad de chile que le quiere agregar a su comida.

“Nosotros tenemos a disposición de los clientes chile habanero, chile de árbol (un chile seco), el chile guajillo y el cascabel”, destacó.

Además de los tacos tienen a la venta sopa azteca, chilaquiles, las tortas, el coctel de camarón, el mole verde, el mole rojo, el pozole y tamales. Así como pan de muerto, rosca de reyes.

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Los chilaquiles cuestan ₡5.000, la sopa azteca ₡1.900 y la grande ₡3.500 y las tortas le salen en ₡4.000. Se puede pedir de chorizo, de carne o de alambre.

La Fonda mexicana abre de martes a jueves de 5 p.m. a 10 de la noche y viernes, sábado y domingo de 12 p.m. a 10 de la noche. Se puede comer dentro del local o pedir al 8899-8921.

“Nos gusta que la gente se sienta a gusto, como si estuviera en un rinconcito mexicano. Les ofrecemos los mejores productos a precios accesibles”, añadió.