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Uno de los reclamos que realizaron en el Herediano sobre el gol de Jonathan Moya este miércoles en el primer juego de la semifinal es que el atacante estaba en fuera de juego al momento de anotar.
Tanto Héctor Altamirano como Robert Garbanzo, técnico y gerente florense dijeron que hasta el línea Jeriel Valverde alzó la bandera para señalar una posición prohibida y el árbitro Adrián Chinchilla no le hizo caso y este fue el que concedió el gol.
Según las reglas de la International Board o IFAB, como se le conocen en sus siglas, lo señalado por los heredianos está mal, porque si bien es cierto Valverde alzó su bandera, no fue para señalar un offside.
En su sitio web, la IFAB en su apartado “LENGUAJE CORPORAL, COMUNICACIÓN Y USO DEL SILBATO”, establece cómo se procede en casos donde hay una duda de gol para que el línea dé una señal al árbitro central de lo que está marcando.
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“Cuando esté claro que el balón ha atravesado completamente la línea de meta entrando en la portería, el árbitro asistente establecerá contacto visual con el árbitro sin dar ninguna señal adicional.
“Cuando se haya marcado gol pero no exista la certeza de que el balón haya atravesado completamente la línea de meta, el árbitro asistente primero deberá levantar el banderín para atraer la atención del árbitro y después confirmará el gol”, detalla la regla.
Henry Bejarano, analista arbitral de La Teja, ratificó que el gol está bien dado, el balón ingresó, que no hay fuera de juego y que la técnica del línea fue la correcta.
“El procedimiento que se hizo está bien en el caso de gol dudoso, bandera arriba, contacto visual con el árbitro central y él con su silbato dará el gol. Nunca hay fuera de juego, lo que se señala es el procedimiento que se dio y es gol porque el balón pasó en su totalidad la raya de gol como lo establece la regla 10″, destacó.
