El portero Alfonso Quesada agradece a la dirigencia de Grecia y al técnico Johnny Chaves por darle la oportunidad de volver a la primera división, en la que estuvo con Alajuelense y San Carlos, entre otros clubes, y demostrar que le queda cuerda.

Quesada se ha convertido en una muralla, en seis mejengas solo ha permitido dos goles y gracias a su accionar, Grecia se ubica de segundo en la tabla con 10 unidades, las mismas de Saprissa que es líder por haber anotado más goles. Además le atajó dos penales a Guanacasteca (fecha 4) y ha destacado en todos los juegos.

A sus 33 años, Poncho, como le dicen, siente que volvió a debutar en la máxima categoría, luego de su paso por la Liga de Ascenso, con el Barrio México. Firmó por este y el próximo torneo.

“Estoy agradecido con Dios y con mi familia, que siempre me apoyan. Mi carrera me ha costado por las lesiones en los hombros, por lo que para mí regresar fue como debutar de nuevo”, afirmó.

“Sé que sin mis compañeros no podría hacer muchas cosas, porque ellos son importantísimos”, manifestó.

Quesada estaba a punto de renovar con el cuadro josefino cuando lo llamaron de las panteras.

“Luego de que finalizó la Liga de Ascenso estuve de vacaciones y había conversado con el Barrio para renovar. Estaba tranquilo, porque existía la posibilidad de seguir en el equipo y un día me llamó Kenneth Paniagua consultándome si quería jugar con Grecia.

“Sentí una alegría tremenda, porque todo jugador quiere estar en primera. Cuando le dije a don Roy Sáenz (presidente de Barrio México) sobre el interés de Grecia se puso contento y se comportó de una manera muy profesional”, relató.

Pasatiempos. Cuando tiene tiempo libre, a Alfonso le gusta andar en bicicleta, investigar sobre fútbol y próximamente retomará sus estudios. Además, aprovechar para visitar a su familia, en Pital de San Carlos.

Nueva mentalidad

Para Alfonso su paso por la segunda fue enriquecedor.

“La Liga de Ascenso ha mejorado mucho en lo futbolístico, hay más exposición en los medios de comunicación, por lo que eso que dicen que la Liga de Ascenso es el cementerio de algunos jugadores no tiene nada que ver.

“Le saqué provecho a esta experiencia y creo que por algo me llamaron de Grecia”.

Quesada agregó que los jugadores griegos están comprometidos a mejorar todos los días, razón por la cual llegan una hora antes del entrenamiento para trabajar en aquellos detalles que desean fortalecer.

“A diario hago trabajo para fortalecer los hombros, trabajo con pesas y ligas, para que haya buena movilidad. Además estoy trabajando en el tema de mi peso, mediante un plan (nutricional) y aunque llevo poco tiempo ya me siento mejor físicamente”, manifestó.

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El portero aún no se ve colgando los tacos y trata de no hacerle mente a una posible fecha para el retiro.

“Eso solo Dios lo sabe, trato de no pensarlo mucho, de prepararme, dar lo máximo y siempre mejorar. Con las lesiones nunca se sabe, pero ahora disfruto el momento”, afirmó cargado de experiencia.