Por más quejas y molestias dadas, el Puntarenas FC fue el equipo más perjudicado luego del primer reporte de sanciones del Clausura 2023 por parte del Tribunal Disciplinario de la Fedefútbol.
El partido del domingo ante San Carlos en el estadio Carlos Ugalde, en Ciudad Quesada, estuvo cargado de polémica por la actuación del réferi Benjamín Pineda.
En el duelo, que terminó 1-1, Pineda expulsó a tres jugadores chuchequeros, Rodrigo Garita, William Fernández y Daniel Quirós y un sancarleño, Roberto Córdoba, motivo por el que los naranjas salieron chivísimas y afirmando que apelarían las sanciones.
Al final a Fernández le clavaron tres mejengas por ser culpable de: “incurrir en conducta violenta al sujetar y empujar del cuello a un adversario y configurarse la agravante de no encontrarse en disputa el balón”, según reportó el Tribunal.
A Garita y Quirós les metieron dos partidos a cada uno por ser culpables de juego brusco grave y lanzar el balón lejos luego de ser expulsado.
Los motivos por los que no les dieron pelota en la apelación de las rojas dejaron bastante mal parado a los porteños.
“Las solicitudes fueron rechazadas ad portas (de inmediato) por presentarse de manera extemporánea (fuera de tiempo) y por pretender que el Tribunal interpretara las decisiones del árbitro, cuando los procesos sumarios de investigación son solo aplicables para el error de identidad y la actuación simulada que induce al árbitro a error”, destacó el tribunal.
En el caso del norteño Córdoba le metieron tres partidos por ser culpable de conducta violenta.
Como en la primera fecha las rojas estuvieron a la orden del día, al griego Juan Carlos Amador le metieron tres partidos por golpear a un rival, mientras que a los guadalupanos Andy Reyes y Lautaro Ayala les clavaron una fecha de castigo, igual que al guanacasteco Jeylan Mitchell.