Ricardo Blanco, defensor del Deportivo Saprissa, tuvo un punto de quiebre en medio de la alegría por el nuevo campeonato.
La pachanga en el estadio Saprissa estaba en su punto máximo cuando el jugador, de 33 años, nos confesó lo duro que ha sido para él no ser tomado en cuenta para el Mundial de Qatar.
Blanco recordó que se lesionó antes del repechaje de la Selección Nacional ante Nueva Zelanda y ese duro traspié lo hizo, incluso, pensar en la posibilidad de colgar los tacos.
“Fue un campeonato donde lloré y pensé en dejar el fútbol al quedar fuera de la Selección cuando se iba a jugar el repechaje. No quería saber nada del fútbol, pero tengo motores en mi casa, mi esposa, mi hija y mi familia, quienes me alientan y no me di por vencido.
“Este título representa demasiado. Me he llevado golpes fuertes, pero me dije: ‘Aquí me levanto y alzo esa 37 porque quiero darle una felicidad a mi familia’, y se la pude dar con mucho esfuerzo y con los pies en la tierra”, dijo el defensor.
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El jueves pasado, el técnico de la Tricolor, Luis Fernando Suárez, dio a conocer la lista de los 26 jugadores convocados para el Mundial, que iniciará el 20 de noviembre, y Blanco fue uno de los jugadores que quedó fuera.
“Ese instante de quedar fuera de la Selección fue el momento más duro de mi carrera, lloré mucho, quise dejar todo botado y luego me di cuenta que a mi lado tengo a un Dios muy grande.
“Me alentaron mi familia, mis padres y compañeros para que no cediera ante la tentación de abandonar el fútbol. Alexander Robinson (exjugador del cuadro morado) llegó a mi casa a motivarme y eso me alienta”, agregó un poco más calmado aún en plena fiesta.