El exdefensa del Manchester United Rio Ferdinand declaró este jueves que está “decepcionado” porque la Federación Británica de Boxeo le rechazó la aprobación de su licencia profesional.
“Pasé entrenando cuatro o cinco veces por semana desde que anuncié mi voluntad de obtener una licencia de boxeo profesional y subir al ring, pero con pena debo colgar los guantes”, publicó en su cuenta de Facebook el exjugador, de 39 años.
“Decir que estoy decepcionado por esta decisión es poco”, recalcó el seis veces campeón de la Premier League con el United.
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“Siempre he tenido un respeto absoluto por este deporte y no he querido subestimar hasta qué punto sería difícil. Quería mostrar a la gente que está bien tener un objetivo y dar todo para lograrlo. Es importante abordarlo con ganas de lograrlo y darlo todo, aunque las cosas se vuelvan contra ti”, añadió Ferdinand.
Ferdinand fue entrenado por el antiguo campeón de los superpesados Richie Moodhall con motivo de un desafío patrocinado por la empresa de apuestas Betfair.
El antiguo jugador del Manchester United, el West Ham, Leeds y el Queen's Park Rangers, bretea actualmente como comentarista en la televisión británica -BT Sport- y tiene su propia línea de ropa.
A pesar de que Ferdinand no lo logró, los británicos Curtis Woodhouse y Leon McKenzie, antiguos jugadores de Birmingham City y Crystal Palace, respectivamente, sí probaron suerte en el boxeo. El propio Woodhouse fue campeón británico de peso superligero en el 2012.