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Saprissa se come un jamoncito antes del clásico

El triunfo le devuelve la confianza al equipo morado que venía de capa caída

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Saprissa visitó suelo guadalupano y cumplió, sacó la victoria (0-2) y es como si se hubiese tomado un tranquilizante de cara al clásico del domingo.

Saprissa venía de una derrota y un empate por lo que el ambiente se estaba poniendo espeso de cara al duelo ante la Liga.

No fue un partidazo, pero los morados tuvieron siempre el control y con mérito los tres puntos se los llevaron a Tibás, era más que suficiente para este momento.

El Monstruo está buscando salir de un bache que le ha dejado el liderato a la Liga con cuatro puntos de ventaja, pues de los últimos 21 puntos disputados la “S” apenas se ha dejado diez (cuatro empates y dos triunfos).

Mejenga controlada

Saprissa nunca estuvo en problemas, desde el primer tiempo mostró sus ganas de anotar.

Pero fue hasta el minuto 24 cuando Marvin Angulo se bailó a un defensor por derecha y cuando lo dejó sentado se la puso globeada a Luis José Hernández que cabeceó muy bien, pero el balón pegó en el palo y salió.

Ese fue solo el aviso de lo que venía porque tres minutos más tarde cayó el primer golcito de la noche.

El guadalupano, Marco Meneses, intentó despejar un balón pero lo dejó corto y le quedó a Christian Martínez que la agarró picando de derecha y la puso donde Jorge Jara jamás le iba a llegar.

Se puso bueno

Con el marcador en contra en la segunda parte a los pupilos de Geiner Segura no les quedó de otra que adelantar líneas y atacar más.

También era un riesgo irse para el frente porque Saprissa no se iba a quedar de brazos cruzados.

Por eso al minuto 53 el brasileño Tássio Maia se comió un gol cantado después de que Jara rechazara el balón tras un remate de Angulo,

Vladimir vio que el juego estaba suave y al 58 mandó a descansar a Mariano Torres, lo sustituyó Ricardo Blanco.

También vio que Tássio no estaba como para meter goles y mejor mandó a la cancha a Jairo Arrieta.

El resultado de esos cambios llegó rapidísimo, tan solo pasaron cuatro minutos y el Pamperito se escapó por la banda izquierda, entró como Pedro por su casa, se frenó, levantó la mirada y vio que Blanco venía con ventaja y se la puso como con la mano solo para que la empujara hasta el fondo y metiera el segundo del Sapri.

Ahora sí, la cosa estaba cuesta arriba para Guada que siguió poniéndole, pero dejando espacios.

Michael Barrantes reventó una bola en el palo y Marvin voló el contraremate.

Malas noticias

Lamentablemente para el Sapri, Blanco solo entró a hacer el gol, porque duró en la cancha 26 minutos.

Ricardo tuvo que salir por lesión al 85, un malestar en su rodilla derecha no le permitió continuar después de una barrida que hizo y tuvo que salir alzado del estadio “Colleya” Fonseca.

Pésima noticia porque el lateral no pudo estar en los dos últimos juegos de los tibaseños por una lesión muscular y ahora es prácticamente imposible que sea opción para el duelo ante los liguistas.

La mesa quedó servida para el clásico, no estará en juego el liderato, pero es la oportunidad perfecta para los morados de acercarse a la Liga o bien los manudos pueden prácticamente amarrar el liderato de una vez por todas.

Andrés Mora

Periodista con licenciatura en Comunicación de Mercadeo. Forma parte del equipo de Deportes. En Grupo Nación desde noviembre del 2011.

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