El defensor Henry Figueroa es de los que sale de una bronca para meterse en otra y este domingo en el fútbol hondureño lo confirmó.

El exmanudo fue duramente criticado por una brutal entrada que realizó a un rival durante el duelo entre su club, el Marathon, ante el Olimpia.

Se jugaban 22 minutos, cuando Elvin Casildo del Olimpia llevaba la pecosa por el sector derecho cerca del área, momento en el que apareció Figueroa e intentó detenerlo mediante una especie de patada karateca, por lo que cuando lo “pescó” le entró con los tacos de frente y lo botó con una tijereta.

Casildo se quedó en el suelo retorciéndose del dolor, mientras los comentaristas del partido comentaron asombrados la violenta jugada, indicando que lo tenían que expulsar de inmediato por semejante falta.

“¡Uuuuyyy eso es tarjeta roja!, ¡no te podés barrer así, no, no, por Dios Henry no, no puedes hacer eso! Por supuesto que es tarjeta roja, no hay ninguna duda, es una entrada descalificadora, inaceptable de parte de un jugador tan experimentado, con su trayectoria”.

“Por Dios, no, no, estoy queriendo entender qué motiva a Henry Figueroa a hacer una entrada así, tan brutal como esa, repito, el partido está muy bien para Marathon, lo maneja, Olimpia no tiene tanta idea, pero ahora Henry con ese horror de entrada expone a su equipo”, comentaron.

Tal como lo advirtió el comentarista, el Monstruo Verde resintió la expulsión y Olimpia ganó 2-1 el duelo como visitante un partido que estaba empatado a cero cuando se dio el patadón.

Como si no fuera suficiente después de la acción, Figueroa tuvo el descaro de reclamar la sanción y agarró la bola y se la pegó en la cabeza al árbitro mientras se dio el alboroto por la jugada.

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A la espera de investigación.

La falta fue fuertemente criticada en redes sociales de parte de periodistas y aficionados que se cuestionan como un tipo así volvió al fútbol catracho, después de dejar a Alajuelense en medio de una novela que involucra un presunto dopaje.

En Tiquicia hay una investigación para determinar la culpa o no del jugador después que se inventó un cuentazo para evitar un control antidopaje en diciembre del año pasado. Figueroa se quitó el tiro indicando que se había muerto su mamá, quien luego resultó ser su abuela, pero al final todo era mentira, nadie murió.

“La investigación continúa en el procedimiento de gestión de resultados (sancionatorio), ya han sido citados para rendir su testimonio los miembros de la comisión antidopaje de la Fedefútbol, nosotros esperamos que en estos quince días ya tengamos una resolución de cómo avanzó la investigación”, explicó a La Teja Juan Carlos Baldizón , presidente de la Comisión Nacional Antidopaje.

De esta manera las sanciones a Figueroa podrían ir más allá de una falta brutal como la que deberá afrontar por su juego sucio.