Ellos pagan su entrada como cualquier otro, pero en lugar de buscar campo en la gradería, más bien jalan soplados a acomodarse bien pegados a la malla y no se meten al terreno de juego porque no los dejan.
Ellos pagan su entrada como cualquier otro, pero en lugar de buscar campo en la gradería, más bien jalan soplados a acomodarse bien pegados a la malla y no se meten al terreno de juego porque no los dejan.