Nicole “Coco” Roper lleva varias semanas viviendo sola tras separarse de su esposo y, aunque no está arrepentida de su decisión, habló de lo duro que es en ocasiones, principalmente por su hija.
La hija de la expresentadora Lynda Díaz abrió su corazón y contó cuál ha sido uno de los aspectos más difíciles que le ha tocado enfrentar ahora que está por divorciarse.
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“Lo más difícil son los momentos en los que uno tiene que dejar a sus hijos en otro hogar y tener que volver como a explicar, cuando digamos Ellie se quiere quedar conmigo, el porqué me tengo que ir hoy, por qué si yo me quiero quedar contigo, y tener que compartir ese tiempo que, obviamente, es lo justo de hacer y lo correcto de hacer, pero no importa y aunque uno sabe que está haciendo lo correcto y que se tomó la decisión correcta también”.
“Siempre a uno como mamá le duele el corazón, inclusive imagino que como papá también, tener que dejar a sus hijos y sé que también a ella a veces se le hace difícil”, dijo en sus historias de Instagram.
La influencer costarricense, radicada en Texas, Estados Unidos, dice comprender la situación y ese sentimiento de dolor, pues para ella no es fácil ver a su hija triste, pero que, después recuerda la separación fue por el “bien de todos, porque ahora todos tenemos paz en muchos aspectos de nuestra vida”.
Y, aunque todavía no se acostumbra a esta nueva vida de separada, trata de no sentirse mal y pensar que no es la única que “pasa por esto”.
Este miércoles Coco Roper tuvo que regresar al hospital, luego de cuatro semanas sin estar internada, y es por eso que su hija estará estos días con su papá.
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A ella le harán un nuevo cambio de tubo, que es por donde hace sus necesidad fisiológicas, por lo que estará hospitalizada pocos días.
“Sí tuve una infección, pero lo estuve manejando con antibióticos por vía, así que vamos a ver como me va en este cambio de tubos, esperamos que sean otras cuatro semanas sin ir al hospital, eso me haría ¡wow!, superfeliz, y me siento muy agradecida con Dios", dijo.