Rodolfo Méndez: “El mejor regalo de Día del Padre es tener con vida a mi hijo”

El periodista Rodolfo Méndez vivirá este domingo un Día del Padre bastante especial con la alegría que le da tener a su hijo, Adrián, recuperándose de los momentos tan duros que pasó por culpa del covid-19.

El experimentado comunicador de radio Columbia es padre Adrián, de 37, y Laura, de 31, quienes al igual que el tata son apasionados del deporte.

Rodolfo cuenta que ningún otro Día del Padre ha sido tan emotivo para él, pues podrá pasarlo con el narrador de Teletica radio, quien estuvo más de 50 días luchando por su vida por culpa del covid.

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-¿Cómo describe su vida de papá?

Al principio me costó porque fui padre muy joven. No tomaba el rol como tenía que ser, pero con la ayuda de mi esposa tomamos las riendas. Todo se fue acomodando y he tratado de cumplirla lo mejor que pueda, eso sí, mi esposa sigue siendo más exigente que yo, ella es la de la última palabra y yo tratando siempre de apoyarla.

-¿Cómo hizo para que les gustaran tanto los deportes sabiendo que el papá en muchas ocasiones no estuvo por culpa de algún evento deportivo?

Fue natural, pero desde de que era novio de mi esposa la fui metiendo a ella, que tampoco le gustaba, de hecho recuerdo que en 1983 fuimos al estadio Saprissa a ver un Cartaginés contra Uruguay, en segunda división y Adrián anduvo en la panza de Damaris y así en varios estadios y ya cuando nació se hizo muy fiebre. Cuando nació Laura también, se hizo muy fanática del fútbol, recuerdo que carajillos Adrián narraba los partidos y ella los comentaba.

-¿Qué le genera que Adrián decidiera seguir sus pasos?

Mucho orgullo, pero fue algo que se dio. Un excompañero mío de la radio de Cartago lo invitó cuando Adrián tenía 13 años, yo no creía porque era un carajillo y me convencieron, eso sí, yo nunca fui de los que se pone a decir que mi hijo era lo mejor del mundo, le di permiso y narró. Mi hija lo grabó porque yo tenía que ir a un partido en Alajuela, cuando lo escuché me pareció bien, mejor que muchos que tenían tiempo de estar en eso.

Le dije que si le gustaba supiera que en esto no hay domingos, no hay feriados y a veces ni libres y le gustó, al principio era el hijo de Rodolfo, pero ya después se fue haciendo nombre y don Reynaldo Lewis le dio una oportunidad en el 42 y ya va más de 20 años en esto.

-¿Han podido trabajar juntos?

Solo una vez, en radio Cartago en un torneo de verano de básquetbol, narramos un par de partidos juntos, pero nada más. Sí nos ha tocado estar narrando el mismo partido, recuerdo que la mejor fue cuando Adrián tenía 19 años y estaba trabajando en radio América, junto con Juan Ulloa y los mandaron a México y yo por Columbia y compartimos en el estadio Azteca para un partido de la Liga, sinceramente no son muchos los que han narrado ahí y menos con un hijo a la par y aquí a cada rato nos pasa, la última vez fue en Jicaral.

-¿Le gustaría tener más chances de trabajar juntos?

Claro, lo que pasa es que ahora estamos en la competencia (Columbia y Teletica radio), al igual que le digo a todos, la competencia es el micrófono y ya después sigue la relación, aunque aquí en la casa tenemos una ley que de cosas íntimas del trabajo no se habla. También tenemos juntos la página RM deportes y hacemos programas los miércoles en la noche, sábados al mediodía y domingos en la noche, ahora con lo que pasó no hemos podido, pero apenas se pueda, volveremos a hacerlo.

-¿Qué se dicen cuando se ven en los estadios?

Normal, compartimos como cualquier otro colega, si me tiene que dar algún consejo me lo da, porque los jóvenes conocen más de tecnología que los viejos o yo a él.

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-¿Cómo está Adrián?

Muy bien, en plena terapia física, Carlos Quesada y Marvin Aguilar son los dos fisioterapeutas que nos han ayudado mucho, ya incluso podemos sentarlo en la silla de ruedas.

-¿Qué avances ha tenido?

Ahora mueve las manos, come y se lava los dientes solo, ya se sienta sin irse para un lado u otro y lo que nos falta es ponerlo en pie. No hay duda que es el mejor regalo que he recibido del Día del Padre, que Dios nos dio la posibilidad de volver a tenerlo con nosotros.

-¿Qué planes tiene para festejar ese día?

Como de momento él no puede salir, vamos a hacer algo en la casa, igual él como padre. Que sea algo pequeño, pero festejar el día y la vida de él. Ahora él se ha salvado porque hay muchos partidos entonces pasa entretenido y seguro el domingo también.

-¿Ya se dio cuenta Adrián de que mucha gente estuvo orando por él y mandándole buenas vibras?

Claro, de todo se ha dado cuenta, está consciente de todo lo que se vivió en torno a la salud de él.

-¿Cuál es el aprendizaje más grande que tuvo usted con todo esta situación?

Que hay confiar en Dios y en el poder de la oración. Él sabe lo que nos toca y si hubiera sido otra su decisión, también la hubiéramos respetado como tiene que ser.

-¿Qué consejo le da a los papás que viven situaciones similares a la suya?

Tener paciencia y tranquilidad, hacer todo lo humanamente posible y confiar en Dios.