Una mamá de 20 años de Texas, cuyas hijitas murieron después que las dejó encerradas en un automóvil por 15 horas pese al calor intenso, fue sentenciada a 40 años de prisión.
El diario Kerrville Daily Times reportó el viernes que Amanda Hawkins fue sentenciada por las muertes de sus hijas en Kerrville en junio del 2017, unos 105 kilómetros al noroeste de San Antonio.
Hawkins se declaró culpable en septiembre de dos cargos por abandono y por poner en peligro a menores, y otros dos cargos por causar lesiones a un menor.
Reportes de la policía muestran que Hawkins dejó a Addyson y Brynn, de dos y un año respectivamente, dentro de su vehículo mientras ella visitaba a amigos. Las temperaturas rebasaron los 27 grados Celsius cuando las niñitas estaban en el vehículo.
Las pequeñas quedaron encerradas desde la noche del martes hasta el miércoles a eso del mediodía.
Al darse cuenta de lo que hizo y ver el estado en que estaban sus hijas, no buscó ayuda de inmediato, pues temió las consecuencias, por eso intentó bañar a las niñas y revivirlas, pero ya estaban inconscientes y no reaccionaron. Por eso decidió llevarlas al hospital y le mintió a los doctores al decirles que ellas se habían desmayado después de oler unas flores.
De acuerdo a la estación de televisión local KABB, no tenían alimentos ni bebidas dentro del vehículo, además, sufrieron momentos tan desesperantes que hasta gritaban, pues los investigadores dicen que un amigo de la madre les confesó que alguien dentro de la casa las escuchó llorar y hasta le dijo a Hawkins que las trajera dentro de la casa, pero ella no le hizo caso.
“Este es, con mucho, el caso más horrible de abuso infantil que he visto en los 37 años que he estado haciendo cumplir la ley”, dijo Rusty Hierholzer, el oficial policial a cargo del caso.
Al parecer, ya antes las había dejado encerradas dentro del auto, pero está vez el desenlace fue fatal.
La mamá se disculpó antes de conocer su sentencia y dijo que las muertes la afectarán por el resto de su vida.